Para el Presidente Chávez esta noticia tiene una particular significación. Conoce, por sus estudios y lecturas, que el Presidente Bouterse estuvo en el poder en los años 80´s, que su partido el NDP asume una postura crítica ante el imperio estadounidense y su ex-metrópoli Holanda, la cual ha pretendido usar a Suriname como si aún fuese su colonia. Además, Suriname es un aliado de importancia para la política de integración en UNASUR.
Chávez planteó, ante el Presidente de Guyana, la necesidad de estudiar la posibilidad de construir un gasoducto desde el oriente venezolano que pase por Georgetown y pueda llegar a Suriname. Así como otras opciones como la instalación de plantas de regasificación o el envío de gas comprimido por barco, que pueden ser extensivas a Suriname. Al igual que ve con satisfacción que Guyana haya manifestado su voluntad de convertirse en país observador del ALBA y que lo mismo pudiéra planteársele al nuevo gobierno de Suriname para que asistan a las reuniones con voz y voto. Otros planes con Suriname serían definir todo lo relativo con PETROCARIBE, de modo que pueda ser incorporado plenamente y que se trabaje en la idea de transformar la materia prima proveniente de la explotación de la bauxita.
El Presidente Chávez debería estudiar la posibilidad de asistir el próximo 12 de agosto, o el día que se decida va a ser el acto de juramentación de Denis Delano Bouterse, como Presidente de Suriname. Seguramente, tendrá que revisar sus compromisos, pero en principio considero que vale la pena hacer el esfuerzo de asistir, pues es una forma de integrar más estos dos pueblos hermanos y visitar un país al cual no va desde el año 2000. Por ahora, existe una gran satisfacción por esta victoria popular y los venezolanos esperamos que nuestro gobierno mantenga los mejores vínculos con este país vecino y hermano, pues es una nueva estrella que se une a la lucha contra el poder del imperio, a la lucha por una Segunda Independencia, y por la construcción de la Patria Grande que soñaron nuestros Libertadores. Sin embargo, para lograr este propósito, resulta fundamental revisar el comportamiento que hasta el presente ha tenido la Encargada de la Embajada, quien durante el último año se dedicó a atropellar y maltratar al personal local y a obstaculizar las relaciones que nuestra Embajada tenía con amplios sectores de la comunidad surinamesa.
Caracas, 23 de julio de 2010