La fundación de la organización de naciones Unidas en 1945, fue una necesidad histórica. El fin de la segunda guerra mundial, donde las fuerzas aliadas contra el nazismo derrotó a Adolfo Hitler, permitió contener en la llamada guerra fría, a los dos bloques de influencia geopolítica y militar, que determinaron y determinan hasta la actualidad la diplomacia internacional.
La sede de la ONU se encuentra en Nueva York, ciudad de los Estados Unidos, que junto a Rusia, conforma uno de los bloques dominantes en el planeta, con gran poder militar, con bases militares a lo largo de los continentes y por esa razón es necesario neutralizar un espacio tan estratégico como la sede de una estructura que reúne a casi todas las naciones del mundo.
193, países reunidos para discutir el futuro y la paz, pero 5 estados, son los que deciden la guerra y la paz. Con la influencia de la gran potencia del norte de América, centro de conflictos neurálgicos que ponen en peligro a la humanidad por sus intervenciones e invasiones a territorios soberanos.
La posibilidad de una guerra mundial está a la vista, aunque existen ya guerras emprendidas desde el pentágono y apoyadas por sus aliados en la OTAN. Evitar la desaparición de la especie humana, por la posibilidad de una guerra nuclear, pasa por reestructurar el consejo de seguridad de la ONU y trasladar su sede a un escenario distinto.
Las voces por la convivencia son burladas por la prepotencia de un gobierno como el de Barack Obama, que decreta guerras y bombardea a nombre de la paz y la lucha contra el terrorismo. Los objetivos de búsqueda de la armonía entre los territorios se ven afectados por una política hegemónica que se fortaleció a raíz de la desaparición de la Unión Soviética y la permanencia del bloque pro occidental de la OTAN, liderado por Estados Unidos.
La voz del Presidente Nicolás Maduro en la ONU, exigiendo el fin del bloqueo a Cuba, liberación de Oscar López Rivera, quien "es el Mandela de América Latina" dijo Maduro. Tiene 33 años preso este ciudadano, por luchar por la independencia de Puerto Rico.
Se hace necesario desaparecer las prácticas colonialistas, por ejemplo devolver las islas Malvinas a la nación Argentina por parte de Inglaterra, que cuenta con el visto bueno de los países en la ONU. La transformación en las relaciones diplomáticas de Venezuela , por ejemplo, permitieron abrir en todo el mundo un compás y redimensionamiento de visiones independientes en los acuerdos, amistad y tratados comerciales con China, Irán , Cuba, Rusia y todos los territorios considerados enemigos de los gringos.
Existe una nueva situación histórica, la geopolítica mundial ha cambiado, es importantísimo democratizar la ONU y convertirla en un verdadero instrumento de la libertad mundial y la paz. Los Estados Unidos deben ceder ante su política de hegemonía e irrespeto a los países soberanos. Los pasos que se tomen ahora para eliminar las tensiones mundiales, le darán a la ONU mayor legitimidad y confianza en los países que la forman.