Se acaba de repetir en Brasil casi el mismo escenario electoral del 2010. En esta oportunidad la Presidenta Dilma Rousseff no alcanzo el 50 por ciento por lo tanto habrá una segunda elección el próximo 26 de Octubre. Se desplomo a última hora la artificial candidata Marina Silva y se coló el derechista Aécio Nieves. Dentro de dos semanas los brasileños escogerán entre dos proyectos: La propuesta a la reelección de Dilma Rousseff apoyada por el PT y una amplia alianza de izquierda y la presentada por el derechista neoliberal Aécio Nieves del anacrónico partido PSDB, que ya desgobernó ese país. Neoliberalismo puro. Brasil se juega su futuro en dos semanas. Está de por medio continuar la política social iniciada por el ex presidente Lula hace 12 años y que se ha traducido en la erradicación de la pobreza a 21 millones de brasileños, mejoras sustanciales a la llamada clase media y logros elocuentes en la estabilidad económica y en las áreas de salud y educación. No hay dudas que Dilma y el PT garantiza un gobierno de inclusión social y de apertura a los procesos de integración que hoy emergen en nuestra región. Por otro lado está la formula de Aécio Nieves, quien representa a los sectores económicos y mediáticos de esa nación. No es casual que el llamado Consejo de Empresas de Brasil (Fedecamaras) este apoyando abiertamente esta propuesta neoliberal. Una victoria de este candidato significa volver a la regresión privatizadora en grado superlativo y pulverizar todo el proceso de integración e independencia de la cual Brasil ha jugado un rol destacado (Unasur, Celac). La suerte está echada. Serán dos semanas de intensa campaña, donde el reto de Dilma Rousseff será posesionar en los electores brasileños los grandes logros sociales, políticos, económicos y que los poderosos medios privados de comunicación han invisibilizado de manera miserable. Desde la patria de Bolívar y Chávez estaremos atento a lo que pase en la hermana república. Apostamos con pasión y fe revolucionaria en la victoria de los compatriotas agrupados en torno a Lula Da Silva y Dilma Rousseff, líderes indiscutibles de la izquierda brasileña y latinoamericana. Este mes de Octubre serán además elecciones en Bolivia y Uruguay. Que nadie trunque el camino triunfante de nuestras revoluciones. No tenemos otra opción que alcanzar el triunfo. Como decía Hugo Chávez: ¡UNIDAD, LUCHA,
BATALLA Y VICTORIA ¡!