Quienes recibimos la oportunidad de estar en el Foro de la Sociedad Civil y Actores sociales en el marco de la Cumbre de las Américas, acá en la ciudad de Panamá, en mi caso, como vocero del Colectivo Cacique Nigale, asentado en la Parroquia Francisco Eugenio Bustamante del Municipio Maracaibo, una de las más grandes de Venezuela, no nos ha sorprendido como la derecha internacional y sus aliados, ejercen su doble moral en el trato de las víctimas y los victimarios.
En el caso de las delegación venezolana, 12 integrantes a pesar de haber recibido la invitación y código de acreditación, de parte del Ministerio de Relaciones Exteriores de Panamá, hasta última hora debimos entrar al evento con una lista, ya que no aparecieron nuestras credenciales, entre estas las del Comité de Victimas de las Guarimbas, pero si recibieron su oportuna acreditación los victimarios que apoyaron con su actitud que fueran vilmente asesinados compatriotas venezolanos en las guarimbas, bajo el silencio cómplice de la oposición venezolana, entre ellos, la esposa del político preso Antonio Ledezma, quienes se dan el lujo de realizar una manifestación pidiendo la libertad de los políticos presos, con autorización del gobierno panameño.
Por otra parte, de la delegación cubana; victimas durante más de cuatro de décadas de un criminal bloqueo económico, 28 compatriotas cubanos, al igual que los venezolanos tampoco fueron acreditados, lo cual generó una enérgica protesta de las delegaciones de ambos países, sin embargo, los victimarios del pueblo cubano, entre ellos, el asesino del Che Guevara y el terrorista pagado por la NED, Guillermo Fariñas, si recibieron oportunamente su acreditación, al igual que las mercenarias Laritza Diversent y Yaremis Flores.
Así mismo, tal como, también lo habíamos previsto, CNN con sus satélites en Panamá y en el resto del mundo, desde la cumbre, realizan su trabajo de posicionando de matrices de opinión en defensa de los mercenarios cubanos, que se auto nombran como representantes de la "sociedad civil cubana" y por supuesto, disparando sus dardos envenados contra la revolución bolivariana y fortaleciendo la posición de los victimarios y deslegitimando las voz de las víctimas.