De pavoroso espectáculo, podríamos catalogar el bodrio de "debate" que protagonizaron Pablo Iglesias y Albert Rivera, en un canal privado de TV, en España.

Cuando el mismo Presidente de la Disney, "se fascinó al ver tanta ternura, amistad y sonrisas" , son palabras textuales suyas, es para saltar todas las alarmas, de cualquier analista con dos dedos de frente, aunque estos fueran los flaquísimos del Quijote.

¿Como es que llega con esa inmediatez a todo un Presidente de la Disney, ese engendro de debate? ¿cual importancia intercontinental tenía semejante pugilato para una empresa dedicada al entretenimiento y al público infantil, para más inri? Definitivamente, aquí hay truco.

Desgranemos el hecho:

Le invito a que conozca la saga familiar; Rober Iger es el Presidente actual de la Disney y su padre, Arthur, el anterior, vicepresidente. Ambos, representantes del Poder Judio, político y económico en EEUU, con estrechas relaciones con el mundo del marketing y la comunicación y con conexiones, más que conocidas, con la mafia mexicana, entre otras realidades.

Está puesto en marcha el operativo para dar forma, a toda velocidad, al Plan que ha ideado OBAMA, de crear "centros de innovación" para la
formación de "nuevos líderes" en las sociedades civiles, con el pretexto de "proteger la libertad y la democracia".

No es un secreto que los americanos en su desesperado intento por mantener la hegemonía mundial, están empeñados en la consecución de
lo que llaman EL GOBIERNO MUNDIAL. Ellos pretenden imponer, una vez más, con sus parámetros neocolonialistas, un nuevo ORDEN MUNDIAL y para ello necesitan, estos "pipiolos", repartidos por el mundo, "por su mundo capitalista y decadente", para sus fines políticos.

De ahi que viendo la imagen, uno imagina de inmediato, al cowboy en la barra americana del saloon. Chicos que usan cinturón tejano, van en
mangas de camisa, cuidado cuerpo libre de adiposidades, físico atractivo, beben café con leche, aunque en el "bar" sobra alcohol, en los estantes y lo más importante, que no dicen nada "decadente", ni sueñan con imposibles socialistas

Esta cuidada foto, hasta la cadera, desposeyendolos de cualquier connotacion sexual directa, son el vivo ejemplo de la convivencia feliz,
del triunfo de la sociedad del espectáculo y de la simplonería. Perfectos maniquíes salidos de los modelos que imperan en su VANITY FAIR.

Las correas de trasmisión de la ideología neoliberal que son los medios de comunicación mundial que posee el imperialismo yankee, no solo no hacen ascos a la industria del entretenimiento para sus fines, sino que esta ha sido y por lo visto, lo sigue siendo, un poderoso medio para el derramamiento ideológico del Imperio, sobre las nuevas generaciones, para la perpetuación del mismo.

De ahí que, manos a la obra, Disney se pone ya a "adaptar estos nuevos personajes" en su factoría ideológica, porque los "chicos" lo han hecho francamente bien.

Por eso Pablo Iglesias ha dicho: no pienso nacionalizar a ninguna empresa, si esta es competitiva y no va a forrarse a costillas de los trabajadores.

Y Albert Rivera, va más alla, afirmando: nacionalizar los servicios públicos de un pais, es impedir la competencia y responde a una ideología del pasado.

Uno apela a la "bondad empresarial" y el otro, directamente defiende el modelo salvaje neoliberal, como fórmula moderna.

¡¡Manda castañas, con estos cowboys de VANITY FAIR!!

Mientras tanto, el Presidente de Ecuador, el Sr Correa, alerta de esta penetración descarada del imperialismo yankee, con la siguiente denuncia:
"Cabe preguntarse si una sociedad es realmente libre cuando la comunicación está en manos de organizaciones con fines de lucro. En América Latina el problema es mucho más serio, pocas veces he visto la defensa de intereses particulares bajo el nombre de libertad. Los medios de comunicación mercantilistas son el principal mecanismo para mantener la hegemonía cultural del capital sobre los ciudadanos", advirtió.

Las Palmas de Gran Canaria.

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