Una cosa es intuir que el dólar gringo va al matadero y otra, muy distinta, que lo sostenga un banquero suizo. ¡Palabras mayores! Hace varias semanas, el analista económico y antiguo corredor de bolsa, Max Keiser, entrevistó en su programa de televisión al banquero Egon Von Greyerz, quien –al referirse a la masiva liquidación de Bonos del Tesoro por parte de Beijing y Moscú- advirtió lo siguiente: "(…) Los gobiernos de estos países [China y Rusia] saben que la próxima divisa que se desplomará será el dólar. Porque no se puede ser la divisa de reserva mundial cuando se es también el país más endeudado (…)". Las aseveraciones de Von Greyerz no podían ser más precisas y lapidarias.
En la actualidad, Estados Unidos ostenta un nivel oficial de deuda sobre PIB de más de 100%, aunque el baremo real alcanzaría el 300%. Las obligaciones de Washington rebasarían, con creces, los 200 billones de dólares y su PIB anual es de apenas 16.5 billones. Según Jeff Nielson, se trata de un fraude contable perpetrado por el gobierno federal y que "maquillaría" la pésima situación fiscal de EEUU (*). Grecia sería un "niño de pecho" en contraste. En ídem dirección, elementos como la inflación han sido escamoteados por el "establishment" y una manera de ocultarla es reducir la dimensión o contenido de los productos, pero manteniendo el mismo importe (**). Por ejemplo, los paquetes de 12 toallas de papel de hoy son el equivalente a los de ocho rollos de hace dos años: ¡cada cilindro trae menos papel! Un habitante de Oregón, verbigracia, denuncia que paga $6.182 de impuesto de propiedad: son 700 dólares más que en 2014. El seguro médico de él y su esposa son $7.644 (14% más que el año pasado), y la póliza de cuatro automóviles son $2.670 (14% más). La mayoría de estadounidenses está de acuerdo en que la inflación verdadera, en el país, oscila entre 12 y 19%. Desde luego, lo anterior es una consecuencia de la hiperinflación de la masa monetaria en años recientes: ésta ha ido de 800 mil millones de dólares, en 2008, hasta 3.200 millones en 2015. La Reserva Federal es el campeón global en la emisión de dinero artificial: algo que está en las antípodas de lo que pregonan los "Chicago Boys". ¿Qué tal?
LA COMEX TIENE MENOS DE CINCO TONELADAS DE ORO
La Commodity Exchange de Nueva York, la bolsa de comercio de metales a futuro más notable del orbe, ha arribado a cotas insospechadas de carestía. En septiembre, la cuantía de metal dorado se ubicaba en 185.314 onzas y la proporción era de 228 onzas de papel por cada onza física para la entrega. Este mes de noviembre, el "ratio" de la COMEX se ha establecido en 293 onzas de papel por cada onza física, algo inédito, y la cantidad de oro cae hasta las 151.385 onzas o menos de cinco toneladas (***). En la COMEX hay dos categorías de barras gualdas: las "registered" y las "eligible". Las primeras son las que sirven para cubrir los vencimientos de contratos y las segundas son de particulares que las guardan en las bóvedas de la bolsa. Como es evidente, las "registered" o registradas, son las que han estado a la baja de forma drástica y ello enciende las alarmas en los mercados capitalistas, debido a que las "eligible" ya tienen dueño (****). Aunado a esto, el fenómeno del "backwardation" o retroceso en la cotización del oro, ha agregado más fuego al incendio. El "backwardation" es cuando el precio actual del rey de los metales es superior al contrato a futuro más cercano; esta anomalía la hemos explicado en pretéritas ocasiones y es uno de los temas más censurados en los medios de comunicación corporativos. Sólo bastaría que un cliente "duro" de la COMEX solicitase oro contante y sonante, a cambio de los papelitos de ETF, y ésta se hallase en aprietos para cumplir con la adjudicación. Ese "default" de la COMEX sería un terremoto de magnitud 10, en la escala de Richter, en el entramado financiero mundial.
Si mañana chinos y rusos decidieran ir al patrón oro, Washington se vería entre la espada y la pared. Verbigracia, China pudiese respaldar todas sus reservas internacionales con la aleación amarilla y la estimación de la onza se dispararía a 45 mil ó 50 mil billetes verdes, en un abrir y cerrar de ojos. Una serie de sucesos de eminente trascendencia se aguarda en los venideros meses y el "greenback" corre serio riesgo de caer de su infame pedestal; si el banquero helvético, Egon Von Greyerz, alberga la certeza de una lechuga fenecida en el corto plazo, hasta el "club de fans" de Dólar Today debería tomar nota y preocuparse. Au revoir, sacré dollar!
P.D. Este 30 de noviembre, el Fondo Monetario Internacional incluirá al yuan chino en los Derechos Especiales de Giro (DEG), por lo cual éste se convertirá en la quinta moneda de reserva global y Beijing ya no necesitará acumular dólares yanquis en sus reservas con el objetivo de adquirir bienes y servicios en el extranjero. La subida de tipos de interés por parte de la Reserva Federal, en el mes de diciembre, también anuncia tempestades para Washington.
(*) Artículo de Jeff Nielson con el título "Cómo el gobierno de EEUU esconde la hiperinflación": http://www.aporrea.org/internacionales/a216568.html
(**) How The U.S. Government "Covers Up" 72% Inflation Before Your Very Eyes: http://www.zerohedge.com/news/2015-10-23/how-us-government-covers-72-inflation
(***) There Are Now 293 Ounces Of Paper Gold For Every Ounce Of Physical As Comex Registered Gold Hits New Low: http://www.zerohedge.com/news/2015-11-04/there-are-now-293-ounces-paper-gold-every-ounce-physical-comex-registered-gold-hits-
(****) JP Morgan retira el 24% de sus reservas de oro "eligible" de la COMEX: https://www.oroyfinanzas.com/2015/11/jpmorgan-retira-24-reservas-oro-eligibles-comex/