La conquista eterna

El reciente decreto del Estado boliviano de nacionalizar sus recursos naturales sirvió para destapar la olla de latrocinios de las transnacionales que, por la rebatiña neoliberal privatizadora del sector público, se apropiaron de empresas dedicadas a la extracción de materias primas o la prestación de servicios. En esta competencia, la rapiña de las transnacionales españolas nada tienen que envidiarle al conquistador de hace 500 años, el cual, en nombre de la cruz y por medio de la espada y el arcabuz, realizó el genocidio y el pillaje. El FMI aporta la ideología: bajos salarios, despidos masivos, burla de la seguridad social, negación de la soberanía. Los resultados son idénticos a los de hace 500 años, cuando la Inquisición aportó la ideología. Las transnacionales capitalistas matan más gente que las catástrofes naturales.

La lista de empresas es larga, citaremos algunas: Empecemos por la más famosa, Repsol-IPF (su filial ANDINA, S.A.), produce 32% de petroleo y 43% de gas. Sus tropelías, desmanes y abusos son herencia de sus ancestros de hace 500 años. Atropella los DD.HH de los indígenas que habitan los 5 millones de Ha. que tienen en concesión. Comete falsedad contable y fraude al registrar en la bolsa de Nueva York, como propias, el total de reservas de gas que explota en Bolivia. Está demandada por contrabando de petroleo. Exportaba gas a su filial de Argentina a 0,98$Mpc, que lo vendía a 7,55$Mpc, con lo cual bajaba la recaudación impositiva fijada para dicho valor. Igual ocurre con el gas enviado a Brasil. Pero el gas para consumo de los bolivianos lo vendía a precios internacionales ($7, oo), más el subsidio que da el Estado.

Grupo BBVA, administra fondos de pensiones. Aprobó un Bono Solidario para todos los bolivianos que cumplan 65 años de edad, pero, en Bolivia la esperanza de vida es de 53 años para los hombres y 58 para las mujeres. Grupo ABENGOA, da servicio de agua a Cochabamba. Incrementó las tarifas en 200%. Al poco tiempo estalló una revuelta popular que exigió la rescisión de la concesión. La empresa demandó al Estado por incumplimiento de contrato. Para ello cambió el domicilio de Islas Caimán a Holanda y así acogerse al arbitraje del Banco Mundial. Otro grupo que se caracteriza por el mal servicio y altas tarifas es, Aguas Barcelona (Agbar), instalada en varios países.

El Grupo Prisa y la editorial Santillana, tienen la cadena de TV de Bolivia, tres diarios, edición de libros de texto ¡Sin comentarios! Grupo UNION FENOSA-ACEX, compró por $40 millones una empresa pública de electricidad con activos por valor de $124 millones. El servicio es de apagones y tarifas altas. El Grupo “Iberdrola”, por cobrar exceso de consumo en el alumbrado público debió reintegrar $22 millones a municipios de La Paz. El Grupo “Alberti y Aena” administra sólo aeropuertos con rentabilidad (La Paz, Cochabamba y Santa Cruz), 50 aeropuertos no rentables están abandonados.

Advertencia, esta información es de actualidad, no es de hace 500 años. Conquista y deuda “eternas” se complementan.


Esta nota ha sido leída aproximadamente 1855 veces.



León Moraria

Nativo de Bailadores, Mérida, Venezuela (1936). Ha participado en la lucha social en sus diversas formas: Pionero en la transformación agrícola del Valle de Bailadores y en el rechazo a la explotación minera. Participó en la Guerrilla de La Azulita. Fundó y mantuvo durante trece años el periódico gremialista Rescate. Como secretario ejecutivo de FECCAVEN, organizó la movilización nacional de caficultores que coincidió con el estallido social conocido como "el caracazo". Periodista de opinión en la prensa regional y nacional. Autor entre otros libros: Estatuas de la Infamia, El Fantasma del Valle, Camonina, Creencia y Barbarie, EL TRIANGULO NEGRO, La Revolución Villorra, los poemarios Chao Tierra y Golongías. Librepensador y materialista de formación marxista.

 leonmoraria@gmail.com

Visite el perfil de León Moraria para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



León Moraria

León Moraria

Más artículos de este autor