Los añejos imperios derrotados por los ejércitos patriotas de América Latina y el Caribe hace dos siglos, creen tener potestad para agredir a naciones de Nuestra América. No quieren entender, o no quieren darse cuenta, que los pueblos que llaman Hispanoamericanos ejercen su independencia en libre práctica de autodeterminación. El Consejo Europeo, al imponer sanciones contra la República Bolivariana de Venezuela no hace más que seguir los dictámenes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, es decir, se arrodilla cortesanamente frente a su amo.
La "vieja Europa" debe entender que le hace el juego al imperialismo más feroz de la historia, ese poder mundial inmoral que impone sanciones unilaterales violando todas las reglas del juego político internacional, intentando doblegar a nuestros pueblos con el doble rasero de "violación de derechos humanos" y "crisis humanitaria", realidades presentes día a día en los propios estados de la Unión, donde asesinan afrodescendientes con la impunidad reinante. Igual sucede en algunas naciones de Europa, como, por ejemplo, España, donde reina el desempleo, los bajos salarios, el desalojo de familias de sus apartamentos (pisos) y casas, la represión desproporcionada con armas letales y palizas a quienes protestan en defensa de sus derechos vulnerados por un Reino Fascista.
Es un hecho comunicacional la postura de Mariano Rajoy, presidente del (des) Gobierno español, rindiendo cuenta a su jefe Trump. "Estamos en primera línea contra el Gobierno de Maduro", dijo frente a los medios de desinformación.
Igual que los doce ( des) gobiernos cortesanos de América, arremeten contra la República Bolivariana por ser un "mal ejemplo" para el mundo, pues claro que somos mal ejemplo para dictadores, cortesanos, proimperialistas, asesinos, vende patria, neoliberales y toda (mala) suerte de malos vecinos que pululan en Argentina, Colombia, Brasil, Costa Rica, Chile, Panamá, Perú, Paraguay, México, Honduras y la neocolonia Canadá.
Cataluña declaró su independencia del Reino Fascista y recibió represión, cárcel, exilio, asalto y cierre de medios de comunicación, privados y públicos, como parte de la "ración democrática" tipo USA.
¿Es representativo el Consejo Europeo? ¿Con cuántos votos fue electo Juan Manuel Santos y Trump? ¿Tienen moral estos cortesanos para "dejar sin efecto" a la soberana y plenipotenciaria Asamblea Nacional Constituyente?
Vergüenza debe tener, un poco de pudor (si es que les queda) el sólo hecho de tratar como perseguido político y darle asilo a un terrorista como Freddy Guevara, quien cobardemente solicito protección al Gobierno de Chile, cuya ley suprema que rige esa nación es puño y letra del sanguinario dictador Augusto Pinochet, quien con el Plan Cóndor persiguió y asesino a miles de patriotas chilenos y latinoamericanos.
Venezuela sigue rumbo con su democracia protagónica y participativa, con elecciones nacional, regionales y municipales donde el pueblo ejerce su poder soberano, práctica que no puede exhibir la clase politiquera de la "vieja Europa", tampoco los cortesanos de Trump y mucho menos el presidente vitalicio del KKK.