Es muy fácil culpar a Nicolás Maduro de la situación actual donde muchos, incluyendo izquierdistas, pescando en río revuelto, pero sería de ingenuos creer que un gobierno, como este, sea el 100% culpable cuando lidiamos con muchos factores políticos y económicos entre los que cabe destacar; el sistema capitalista vivito y coleando en el país, la intocable oligarquía con sus medios de producción social y una oposición apátrida que entrega nuestra soberanía al imperio norteamericano.

Para no quedar como un fanático ciego como me dijo un lector de aporrea, sé hacer bien mis análisis y críticas al gobierno, a la revolución y al mismo Estado nunca con ánimos de desmotivar y confundir como están acostumbrados muchos por estos lares. A mi parecer estos podrían ser algunas de las fallas que el Estado ha tenido frente a la crisis inducida.

1-La impunidad. Ese es un grave problema porque a veces cuando se asume la tolerancia en amor, los adversarios lo ven como un signo de debilidad como gobierno. Si eres bueno, nosotros seremos los chicos malos, eso sí ¡Perdóname!, pero siguen iguales. Si la ex fiscal hubiera hecho su trabajo bien, sin corrupción y fundamentado en las leyes venezolanas, nos hubiéramos evitado tanta debacle económica.

2-La indiferencia: Cuántas veces el pueblo a través de los medios de comunicación venía denunciando niveles de corrupción en figuras del chavismo, pero se les callaba y hasta sancionaban porque ese tipo de funcionarios, cómplices o sectaritas, preferían que se callarán los casos porque mancharía la revolución. En qué terminó entonces esta actitud; en una galopante corrupción en las instituciones públicas, en especial PDVSA.

3-La falta de voluntad política. Ejemplo de lo contrario es el actual Fiscal General William Tarek Saab quien ha puesto el pellejo e hizo frente a la corrupción. ¡Caiga quién caiga! fue la advertencia de Maduro, y sorprendió que el ex ministro Rafael Ramírez se le acusa de una corrupción de alto nivel y hasta se afirma que de conspiración en debilitar PDVSA para su privatización.

4-La ausencia de controles en las instituciones Públicas. A veces me preocupa la enorme cantidad de dinero que el Presidente aprueba a diestra y a siniestra, no me opongo, pero realmente hay controles y seguimiento a todos esas asignaciones. No sé, no soy funcionario público, espero que el presidente esté atento a que no haya desviaciones y desfalcos. Cómo fue posible que ante las narices de Chávez y después de Maduro los gerentes altos y medios hallan defalcado a PDVSA.

5-La ingenuidad política: Creerle a todos los empresarios privados a quienes se le asignan divisas para importaciones y producción, pero no hubo los controles estrictos y mucho de ese dinero terminó en cuentas bancarias internacionales. El defalco ha sido enorme.

6-Falta de Orientación: No se preparó con antelación políticamente al pueblo tocante a los temas económicos. Chávez lo advirtió, llegó la distorsión ante nuestras narices, y no se atajó a tiempo lo que se venía dando siendo afectado el país en una crisis sin precedente fundamentado en las maniobras políticas, malintencionadas, una hiperinflación inducida y niveles de corrupción aún desde las bases del pueblo con el bachaquerismo.

7-La no producción: Se siguió dependiendo de la renta petrolera y no se estimuló a tiempo y con hechos concretos, la producción nacional privada y pública.

8-La injusticia: No se enjuició a muchos de los líderes de la oposición quienes por un lado se sentaban a dialogar, mientras por el otro, jugaban con cartas marcadas. Cuánta pérdida financiera le han causado a la nación en 20 años con sus paros petroleros, económicos y guarimbas como golpe de Estado, se les recompensó con cargos públicos, partidos políticos y viajes internacionales mal poniendo al país solicitando sanciones.

9-Especulación: No se atacó en su momento los sitios web que especulaban con los precios del dólar paralelo.

10-La Banca: No se controló a la banca pública y privada ante la escasez de efectivo por extracción y contrabando, ya han pasado dos años con esta situación.

11-Militares intocables: Hay una gran cantidad de militares de cualquier rango incursos en delitos y mafias dentro y fuera de la frontera. Eso debe investigarse a fondo y comenzar a equilibrar esa proporción de funcionario uniformados en cargos públicos, debe haber más civiles patriotas que militares.

En un segundo mandato de Nicolás Maduro, debe replantearse, asumirse y corregirse todo esto. No se pide una cacería de brujas después del 20M estamos claros en la defensa y garantía de los derechos humanos, pero tampoco ser un gobierno débil ante el malandraje empresarial y político.