La primera reflexión es que el golpe en Honduras fue un acto desesperado contra el avance de ideas y practicas incompatibles con el orden neoliberal que se nos quería imponer desde los ochenta, y del control imperial sobre el continente.
Corroboramos también que la necesidad de la constituyente, no fue una veleidad “chavista” del presidente Zelaya. Este llegó a convencerse de que era imposible gobernar un país en justicia y equidad, con esa constitución, escrita en el 82 bajo el dictado del resto del militarismo y las clases dominantes, constitución que según Carlos H Reyes (dirigente popular) tenía como funciones fundamentales, la reducción del Estado y la venta del país. Su practica hizo que la distribución del poder económico que en los años 80 era 40% empresa privada y transnacionales, 40%, estado, y 20% pueblo, se convirtiera en esos 20 años en: 75% empresa privada y transnacionales, 20% estado, y 5% pueblo. el ALCA que se firmo en 2.005, se atornillaba con esa constitución. Durante el gobierno de Zelaya convivieron el ALBA y el ALCA. Los proyectos populares y la constitución inamovible. Esa convivencia no podía continuar. Ya el golpe intentó revertir el proceso liberador y el pueblo está luchando por restablecerlo.
Las calles de Tegucigalpa son todo un discurso político. Cuando uno llega a la ciudad encuentra una enorme cantidad de franquicias, recordatorio del neoliberalismo y con paredes repletas de graffitis y contra graffitis, graffitis borrados y vueltos a escribir, como una especie de lucha comunicacional en las calles. “la pared es el periódico del pueblo”, “golpista para que me borras si sabes que voy a volver… firma el pueblo”…
En el plano de las ondas videosonoras, Cholusat sur, Globo, y prensa
escrita como El Libertador, Resistencia y otros medios, junto con medios
como Telesur, Vtv, alternativos, intentan contrarrestar la red mediática
privada. Con un profundo agradecimiento del pueblo.
La presidencia de Zelaya mas el golpe del sector dominante, terminó de despertar y sigue despertando cada día mas a las personas que todavía no entendían lo que estaba pasando en su propio país. Hay gente despierta desde las luchas de los años 50 y de los 80, pero, también habían personas que vivían en el país sin vivirlo, gente que entraba y salía de los mall, pero no veían las cosas que estaban ocurriendo. Entre lo que hizo y trató de hacer Zelaya y lo que terminó de hacer la coyuntura provocada por el golpe, la gente se hace cada día mas consciente.
También nos dimos cuenta, de que como en muchas partes del mundo la clase dominante no es capaz de sentir ni observar lo que esta gestándose en el pueblo, y por eso intentaron algo que el pueblo organizado está intentando revertir, y pienso que lo va a lograr.
Y esta esperanza se apoya en que el pueblo va a seguir luchando, porque no solamente perdió realidades: PETROCARIBE, ALBA, aumento de salario mínimo, tierras a campesinos, becas, sino un imaginario colectivo que empezó a sentir que las cosas podían ser radicalmente distintas. Hubo reformas, que ayudaron a vivir al pueblo, pero también hubo un sueño de transformación mas trascendente.
El pueblo, nos decía David Romero, director de radio Globo, empezó a transitar por el palacio gubernamental, y ya no eran los grandes empresarios vestidos de frac los que entraban allí, sino el mismo pueblo, indígenas, sindicatos; y eso les hizo sentir que algo mas fundamental que todas las reformas, estaba sucediendo, sueños de transformación se gestaban y eso fue lo que intentó parar el golpe. Sólo que paradójicamente, lo disparó, mas profundo.
Observamos también que los medios privados de la clase dominante y los grupos empresariales, son los mismos en todo el mundo. Cuando la gente nos habla de los medios allá, nos parece que nos estuvieran hablando de la mayoría de nuestros medios privados, y cuando se nos habla de los grupos empresariales, del contubernio entre estos dos factores, entendemos que es mas o menos lo mismo. Aun así, llegamos a asombrarnos con las anécdotas del uso de los medios como medios de chantaje al servicio del lucro y de la derecha.
Pienso que la pregunta no es si se va a continuar el camino que se
empezó a transitar con el gobierno de Zelaya, si no cuándo,
porque sentimos que la determinación del pueblo y la ayuda de otros
factores aliados, hacen indetenible el proceso. Cada día hay más gente
en las calles y mas gente en las aceras saludando a las marchas, a pesar
del ambiente de opresión y la represión existente.
Creo que los tres aliados que tenemos son, el destape de las clases dominantes, ya que cada vez la opresión y manipulación es mas transparente y esto aumenta la unidad popular. En segundo lugar la crisis del capitalismo que le esta demostrando al mundo su destructividad ecológica y social. En tercer lugar la solidaridad internacional esencial, tanto a nivel material, de ayuda humanitaria, información y contrainformacion..
Así pasamos al punto del qué hacer.. El acto que haremos varias organizaciones el 11 de septiembre en el Teresa Carreño en Caracas a las 7pm, para recoger fondos para la resistencia es importante, por los aportes y para mantener a Honduras sobre el tapete. Hemos escuchado con preocupación las erradas palabras de Arias, al decir que la crisis se va a solucionar con las elecciones..
Quisiera finalmente proponer dos cosas. Una, una campaña para otorgar al movimiento del Frente Nacional contra el Golpe de Estado de Honduras el premio Nobel de la paz, Se lo merece por el esfuerzo, aún frente a la represión, de controlar cualquier movimiento que implique la mas mínima violencia. Tenemos constancia de que las violencias que se han dado, han sido obra de infiltrados. Pudimos observar el cuidado de los dirigentes del Frente para evitar confrontaciones. La campaña, si no se concreta en el premio, serviría al menos para visibilizar esta lucha pacifica.
La segunda proposición es la presencia permanente de observadores de los Derechos Humanos en Honduras, ya que cuando hay presencia internacional, la represión se detiene o minimiza. Es indispensable y urgente para salvar vidas.
El mundo debe hacer un último gran esfuerzo por resolver el tema del retorno de la constitucionalidad a Honduras. Esto esta, desgraciadamente, en las manos de los poderes fácticos y de los sótanos del imperio a quienes no pedimos que intervengan sino que desintervengan, ya que esta probada la participación del embajador de EEUU en Honduras y el uso de la base de Palmerola en el golpe.. Saludamos las últimas declaraciones del presidente Obama, pero el tiempo urge, y ya los pueblos y la solidaridad internacional han dado todo lo que han podido para ello. No sólo para que vuelva Zelaya, no sólo por la constituyente, sino para con ambos hechos poder construir un país diferente. La victoria del Frente Nacional Contra el Golpe de Estado, es indispensable para que las luchas de los pueblos avancen y se consoliden. Para el avance de la democracia real. De la paz. En el mundo entero.
(*)Documentalista
lilianeblaser@gmail.com