En esta última semana se ha leído y oído un feroz ataque , especialmente de El NAZI.ONAL y la Bancada Golpista, además del Colegio Nacional de Periodistas contra este Programa de Opinión que presenta el buen amigo, Mario Silva, en compañía del buen periodista, Jorge Amorín.
No requiere Mario defensa alguna. Su sinceridad, sus respuestas al feroz ataque de otros medios privados, tanto escritos, como radiales y televisivos deben de ser respondidos por el Proceso Bolivariano sin pena alguna y con la mayor agudeza posible. Y si no lo hace La Hojilla, independientemente, ¿con quién mas cuenta el Gobierno Nacional? Mario es un ciudadano de respetabilidad social, trabajador incansable, le conozco desde sus días en el Bloque de Armas, en la oportunidad de mis años allí en calidad de Consejero de la Presidencia. Jamás fue amonestado ni se le llamo la atención. Sus trabajadores siempre tenían para con su persona una nota grata. Igual su entonces Presidente, “Don Armando” Fue un buen Jefe en un cargo difícil de ejercer.
Son cientos los escritos en defensa de su Programa La Hojilla, todos respetuosos y escritos con la mejor intención. Han surgido de todos los rincones del país. El rating de La Hojilla, a pesar de ser un programa nocturno, después de las 11 PM, es solo comparable con un juego de Venezuela, en estos días en la Copa América. No hay un solo CONTRACHAVEZ, que despierto a esa hora, no lo sintonice. Tiene de seguro mas del dos por ciento que la enterrada para siempre RCTV hablaba del Canal del Estado.
Y por que digo que es el único, o uno de los pocos. Buenos programas de Opinión tiene el Sistema Bolivariano, pero todos mayormente con invitados que si bien dicen las verdades, el mismo hecho de ser pagados, de una forma u otra por el Estado Venezolano o las Instituciones del mismo, les hacen perder credibilidad. No es lo mismo, se sostiene en los mejores sectores profesionales de la publicidad, que gente ajena al Estado emita opiniones a favor o en crítica constructiva al propio Gobierno Nacional que los primeros que ocupan el 85% de los programas de opinión. Claro divulgan la obra de Gobierno que no lo hace el Sector Privado, pero cuando alguien ajeno al Gobierno nacional, aunque sea su simpatizante, lo discute tiene mucho mas interés de parte del televidente o usuario. No recibe Mario instrucciones o pago alguno que no sea lo que merece profesionalmente su tiempo para producir y sostener en el aire el Programa.
¿Qué sería de nuestro país si Mario Silva no ayuda sustancialmente a sacar del venezolano común el grave envenenamiento de que es objeto día y noche de los medios privados, casi todos. Debe haber La Hojilla para rato! Adelante Mario.
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