En la edición de hoy 26/12, en su primera página, el diario Últimas Noticias destaca la siguiente información: “Diciembre ha dejado 437 muertes violentas” y como subtítulo, por supuesto en tipo de letra mucho más pequeña, agrega: “El balance extraoficial contabiliza lo cadáveres ingresados a la morgue en lo que va de mes”.
Buscamos en la página 20 indicada como la que abunda sobre tan trágico balance y no creemos que valga la pena que de nuestra parte hagamos algún comentario, pues la nota aludida es más que suficiente como para que cualquier lector, por más indiferente que fuese, llegue a la conclusión de que, efectivamente, los responsables del manejo de ese tipo de noticias, en esos términos, demuestran que más allá de querer cumplir con el deber de informarle al país sobre estadísticas de las muertes violentas ocurridas en lo que va de diciembre en nuestra ciudad capital, lo que han hecho es manipular en términos descarados datos “inventados” ex profeso, con la finalidad de aterrorizar, generar desasosiego y pánico y para que nos crean el por qué denunciamos esta perversión dantesca de ese medio, leamos la nota que aparece en la página indicada (columna central), sin que le agreguemos algún otro comentario, pues para nada hace falta:
“Violencia. Cifras extraoficiales conocidas por intermedio de parientes de personas abatidas en el área Metropolitana de Caracas, señalan que a la Medicatura Forense de Bello Monte han ingresado este mes 437 cadáveres. La mayoría fueron víctimas de grupos armados que operan en los barrios capitalinos. Durante el día sábado y el amanecer de ayer, los forenses recibieron 39 cadáveres y, según se dijo, en esta navidad hubo un repunte de la criminalidad en las barriadas. Todas las sedes del CICPC fueron dotadas con furgonetas y, además se habilitaron tres en la morgue de Bello Monte para que colectaran los cuerpos de las personas fallecidas en los hospitales. No obstante, hubo un problema fuerte de patólogos y varios deudos se quejaron de la larga espera. Ayer a media mañana hubo un colapso, pues comenzaron a llegar las furgonetas con los cadáveres.”
Aparece
como autor de la nota un tal Ricardo Matheus, quien suponemos es
periodista y
si en eso acertamos, declaramos en alta voz que ello nos deja
estupefactos, pues resulta increíble no sólo que
especímenes de esta calaña ejerzan el periodismo, sino que
diarios que dicen
ser serios y responsables, les den cabida en sus equipos de
redacción…
