Si la capacidad de criticar el gobierno nace de políticos que no son capaces de ser autocríticos, entonces esas críticas carecen de autoridad. Parecieran nacer de la egolatría, del yoismo puro, del narcisismo de los imperfectos como lo sentencia Nicolás Maduro.
Ayer leía en Aporrea una nota con un título muy amarillista por cierto, más bien digno de Noticiero Digital o La Patilla.com: "La revolución rumbo a un estallido social en su contra" Por: Ysaac Jacobo Mosqueda, aquí les pongo el link: http://www.aporrea.org/ideologia/a193938.html
Es un título aterrador, del que se debe esperar una crítica respaldada con argumentos serios. Pero ¡qué me encuentro! Comienza llamando "a la gente" como fanáticos y robotizados. Dice el autor de esta profecía:
".. obedecen lo que dicen los de allá arriba en la cúspide de la espiral o punta superior del triángulo vicioso, elite perversa, llena de corruptos y bandidos. Miles lo hacen por cuidar su "bozal de arepa" otros por oportunismo, siempre por un interés de por medio, nunca por patriotismo, por sacrificio a sus nietos, bisnietos y demás generaciones futuras. Son ellos y punto. Los demás le saben a pupú."
No creo que haga falta hacer ningún análisis de un discurso tan obviamente ególatra, personalista y aberrado. Pero lo peor sigue más adelante, el autor de marras cita como fuente para su fatalismo incontinente, nada más y nada menos que un artículo publicado en "El Universal" diario por todos conocidos.
"Lean el artículo de Juan Antonio Müller: "Gobierno degradado" publicado en el Diario El Universal, cuyo contenido es del tenor siguiente: "En Venezuela padecemos un gobierno con grandes limitaciones para escuchar y operar. Hace seis meses en medio de manifestaciones y protestas convocó a un diálogo con los sectores económicos que creó algunas expectativas, pero que de acuerdo a la opinión de los empresarios no obtuvo resultados significativos."
Es decir, en Aporrea, un portal de izquierda, un escritor que se auto denomina izquierdista, publica una nota fatalista que titula "La revolución rumbo a un estallido social en su contra" que debe entenderse más o menos con un nuevo Caracazo o algo peor, basado en una nota del periódico más ortodoxo y reaccionario, escrita en defensa de los empresarios.
Para colmo termina con estas palabras de colofón:
"Es triste hermanos, cuando todo lo hayan acabado, que hayan exterminado nuestros recursos naturales, entonces los civiles bandidos de esa elite perversa, entregaran el país a los militares para que gobiernen mediante una dictadura bajo el consenso de Washington y si aún Dios está con nosotros, tal vez surge de entre esos militares un Marcos Pérez Jiménez y haga retornar el progreso otra vez al país."
Yo respeto la libertad de expresión, como escribí en mi anterior nota igualmente respeto la amplitud que da Aporrea a todas las ideas. Pero me reservo el derecho a ripostar. Que un señor escriba desde la izquierda una sentencia fatal sobre nuestra revolución y que al leerlo esté basado en un artículo escrito por un opositor y publicado en el Universal, para terminar llamando bandidos a Nicolás y a su equipo de Gobierno, para invocar a que tengamos un nuevo dictador como el asesino Marcos Pérez Giménez, no me parece nada revolucionario ni crítico. Es un trabajo que opera para la derecha, para el desengaño del pueblo en base a nada, a los argumentos de la rancia burguesía.
Por si sirve de algo, hago un llamado a la autocrítica primordial que deben ejercer los que pretenden dársela de críticos, que los hay y buenos. Pero esto que leí hoy no es crítica es confusión y perversión casi que descarada. ¿Cuál es la intención de su escrito señor Isaac Jacob?
¿Es que es un desastre acaso la batalla dada al contrabando en las fronteras, es un desastre las 1.500 bases de misiones que se realizan?
¿O es simplemente que usted solo alimenta su espíritu crítico leyendo bodrios como el Universal??
¡Con Chávez todo, sin Chávez nada!