Hasta cuando en este país, vamos a seguir permitiendo que un grupito de personas, irrespete la memoria de nuestros Libertadores y denigre de los símbolos patrios. Hemos visto hasta el cansancio, como han revolcado por el suelo, la han pisoteado y puesto alrreve a nuestra insignia tricolor, así como también han injuriado, mal puesto, hasta lo último y lo más repugnante, lo dicho por esa señora (lo de señora es un decir) en ese video que viene circulado por allí, que cataloga de gay al mismísimo Libertador Simón Bolívar y a otros héroes de la patria. Pero no solo es eso, si no, que constantemente, se viene atentando contra la base fundamental de la sociedad, como es la familia y en especial, se ataca a uno de sus principales miembro, la mujer. Y todo esto, a la vista de todo el mundo, sin que nadie tome carta en el asunto.
Los medios de comunicaciones privados, en especial las llamadas redes sociales, se han convertido en instrumentos de este perverso accionar contra la ética, la moral y la buena costumbre del convivir nacional. Igualmente se ha utilizado algo que forma parte de la actividad esencial del ser humano, para su goce y diversión sana, como el humor, para vejar, herir, humillar y burlarse de nuestros héroes y heroínas, como de la dignidad de todos los venezolanos. Estos mamarrachos que se hacen llamar humoristas, comediantes, como el tal Laureano Marques, el Chantaing, ese que llaman Er Conde del Guácharo y otros por allí, rallan lo mal vil de la obscenidad y la bajeza. Lo lamentable que algunos Venezolanos caigan en la perversidad de esos show montados por estos, que, ya no hay palabras como nombrarlos, al punto que pagan un dinerar para verlos y que estos en pleno escenarios los humillen, hasta el punto, que ha sucedido, de que sutilmente le mienten hasta la madre..
Los órganos competentes, deben de asumir su rol y actuar de una buena vez, ya basta de advertencias señor Castillo de Conatel y señores de los tribunales de justica, somos un país de una gran historial a la libre expresión, pero aquí hay leyes que todos debemos respetar. Es por el bien de la República y por futuro de las nuevas generaciones..
