Cual invidente sin orientación parece que marcha en sus comunicados la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), alegando que el programa de mucha radio-audiencia a nivel nacional de César Miguel Rondón, habría irrespetado al presidente Maduro, cuando el alcalde de la ciudad colombiana de Cúcuta, afirmase a través del mismo, unas supuestas declaraciones que violarían la "majestad" presidencial. No voy a meter las manos en el fuego por nadie, pero si es así, ¿por qué no procede Conatel de inmediato a "cerrar" tal programa y sancionar al llamado circuito "Éxitos"? ¿O es otra de sus bravuconerías? En todo caso, desde mi perspectiva, al ser este un programa "en vivo", cada quien debe asumir su responsabilidad ante lo que dice y hace. No puede ser ningún locutor responsable por lo que diga un entrevistado en ese momento. Es como si yo saliera con mi hermano y éste comenzara a proferir insultos a alguna autoridad civil y militar, y al ser su acompañante, pues yo también termine sancionado.
Por cierto, es infeliz la carta emitida de Conatel, la cual fue dirigida ante la opinión pública, al mencionar al conductor del programa como "mexicano – venezolano"; siendo éste por derecho constitucional, venezolano de nacimiento, al ser hijo de padres nacidos también en la tierra de Bolívar. En consecuencia, ¿tiene o no elementos xenófobos tal "distinción" atendiendo a la naturaleza política del comunicado? ¿Qué se pretende al decir que el comunicador nació en México?
Lo irónico es que mientras esto ocurre, hay un colombiano de nacimiento que modera un programa en Venezolana de Televisión (VTV, el canal de "todos" los venezolanos") quien además de romper con la ortografía básica del idioma cuando escribe "konducta" por conducta, se dedica a insultar a connacionales, tal y como un grupo de compatriotas hemos sido víctimas de ello, cuando el sujeto referido desde la propia señal de VTV, nos ha tildado de apátridas, pitiyanquis, vendidos al imperio, grupos de "derecha", entre otros epítetos. ¿Qué dice Conatel ante un colombiano quien se dedica a insultar y someter al escarnio público a venezolanos sobre la base de su "libre albedrío?
Sin duda, el órgano de regular las telecomunicaciones en el país es parte del show político en donde si se aplicara la ley, los primeros que deberían salir, serían los recientes programas incorporados a la programación de la mal llamada Televisora Venezolana Social (Tves), que de "social" al parecer ni la morfología de tal nombre le queda, porque en la praxis debería llamarse sexual, cuando hasta las cámaras de lo que ayer tanto se criticó por estar en el otrora canal, se repite cual barajita de álbum infantil. Es propio de ineptos, secundar sus errores, peor, repitiendo lo que ayer fue motivo o excusa para finalizar la concesión de un canal que en su momento se alineó con un golpe de Estado y la desestabilización. Por ello, cuando Chávez asumió la creación de Tves, lo hizo convencido en la necesidad de crear un canal educativo para la información y el entretenimiento, pero hoy, ese canal, salvo por la transmisión deportiva los programas de ese canal son una basura mediática llena de placeres, rifas y estereotipos ajenos con nuestra cultura que sólo contribuyen a deformar el pensamiento por una sociedad justa e igualitaria.
No obstante, Conatel ha avalado con presencia de una "Diosa" (quien acostumbra a mostrar públicamente sus "purezas"), la xenofobia por hijos de venezolanos nacidos en otros países, que extranjeros impongan sus "vocablos" y "konductas" en contra de venezolanos desde VTV, y por último, que Tves se haya convertido en la televisora que convierta a la mujer en cual objeto sexual. A propósito de ser ciego. Quien tenga ojos que vea.