El periodismo no está en crisis, son los valores que desaparecieron de quienes ejercen la profesión. La ética se esfumó, se perdió. La verdad dio paso a la mentira, a la manipulación, al sesgo. Aunque la realidad existe y se resiste, algunas y algunos la ignoran.
Lo desacostumbrado, por supuesto, es noticia en cualquier parte del mundo, así como lo son los hechos naturales, pero es evidente que el hombre es el centro de lo novedoso. Pero cuando lo que está fuera de lo común es alterado por la mano o mente del hombre todo cambia y todo se presta a confusión, no a la confusión natural, sino a la manipulación.
Cuando 2x2 no son cuatro y en vez de cuatro afirmas que el gato tiene cinco patas entonces la situación va mal, muy mal. Cuando de agredido te acusan de agresor, cuando de víctima pasas a victimario y cuando señalas que te agredieron pero no muestras pruebas, cuando aseguras que te sustrajeron objetos de valor pero acusas en general entonces estamos ante la mentira.
Increíble pero cierto. Las mentiras se han vuelto cotidianas en boca de supuestos periodistas, quienes repiten el libreto o guión de una tendencia política de derecha. Así lo han hecho durante 17 años. Es su práctica habitual de desvirtuar los hechos y fabricar, a fuerza de manipulación, "noticias" insólitas.
Los mismos grupos que tomaron el Palacio Federal Legislativo son los mismos círculos que dispararon desde Puente Llaguno el 11 de abril de 2002, recordaba, palabras más palabras menos, la presentadora de CNN internacional Patricia Janiot. Y es que este canal es de los que fabrican esas noticias fuera de lo común.
En Venezuela, igual que Cuba, Bolivia, Nicaragua, es uno de los países donde al agredido lo convierten en victimario. Así, los heridos, golpeados por las "barras de oposición" (así lo identificó Janiot) eran los agresores, los "oficialistas" que tomaron la sede de la Asamblea Nacional donde se intentaba otro "carmonazo", otro golpe de Estado, pero la presentadora nada dijo de eso. Lo más importante para ella y para los dueños del canal era la agresión de chavistas. (CNN es un canal de televisión estadounidense fundado en 1980 por el empresario Ted Turner. Actualmente es parte de Time Warner, y es operada por Turner Broadcasting System, una subsidiaria de Time Warner).
Mientras que la corresponsal en Caracas, Osmary Hernández, daba un reporte completo de los "robos, agresiones y amenazas" que cometieron los "oficialistas". Las barras golpistas y los diputados fascistas de agresores pasaron a víctimas según la versión distorsionada de las "periodistas" de CNN.
Algo no anda mal en "el mejor oficio del mundo", según el Gabo, pero sí en quienes lo ejercen alejados de la ética.