Los venezolanos. Amparados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, tenemos la potestad de tomar iniciativas para que mediante la ley, se pueda garantizar la salud, educación, empleo, vivienda etc. En definitiva tener la mayor suma posible de felicidad. Si nosotros como entidad primigenia y poseedora originaria del poder constituyente, sentimos que estamos vulnerados en cualquier derecho; debemos actuar en consecuencia con el objeto de corregir la amenaza.
Una de las mayores necesidades del ser humano es la salud mental, de ella derivan muchos factores que mantienen en orden a la sociedad y su núcleo central -la familia-. La misma salud corporal , está íntimamente ligada a la estabilidad mental y espiritual; si en determinadas circunstancias la psiquis del ser humano es desviada de la realidad, las consecuencias en todo el ámbito social pueden ser catastróficas. Una información mal contextualizada o manipulada se convierte en mecanismo de ataque del que la manipula en contra de quien o quienes vaya dirigida. Para esto no puede haber tolerancia; un medio de comunicación masivo que se usa como arma de ataque, debe ser neutralizado, tan pronto se tenga noción o conocimiento del hecho. De no hacerlo así, quien tenga la responsabilidad de aplicar las normas legales y no ejecute la acción de protección social, es cómplice del daño que se ocasione. Los daños sicológicos, son traumas que pueden quedar en las personas que los sufren permanentemente, si la inducción de estos traumas se hacen a nivel colectivo, se debe catalogar como crimen de lesa humanidad, pues la cadena de consecuencias, arrastra consigo un numero 3 o 4 veces mayor al que está afectado directamente. Como se puede ver , no es cosa de juego lo que se está llevando a cabo en Venezuela, por parte de ciertos medios de comunicación, que incluso ya están identificados.
Cuando el Sr ministro Izarra, dice que “el canal “tal” no será cerrado”, a sabiendas y reconocimiento que está violando las leyes del estado Venezolano, cae inmediatamente en lo que llamamos complicidad por acción y por omisión. POR ACCION: por que no esta cumpliendo con el deber por el cual esta cobrando un sueldo del ESTADO VENEZOLANO. Estado mismo, que debe velar por los intereses del pueblo, quien le dio potestad para ser su custodio y protector; cuya representación recae en este momento en el Sr ministro Andrés Izarra. También es cómplice por OMISION: por que sabiendo y reconociendo él, QUE HAY DELITOS, no los reprime o ataca como lo manda la Ley. Parece que en el MINCI, y en CONATEL, creen en la cura por osmosis: es decir que de tanto enfermar y disociar a la gente, esta será inmunizada. Creo que están errados señores, por lo contrario, lo que se va es envenenando mas la parte sicológica de la gente, hasta el punto en que se pueda dar una explosión por efecto de la auto protección del organismo. Esta explosión no se sabe que consecuencias infernales pueda tener, lo que si es seguro, es que costara la vida de muchos inocentes. Lo perverso de todo esto, es que cuando suceda, quienes lo promovieron y quienes debieron evitarlo, tal vez se hayan ido del país cuando comience la reacción encadena y nos dejaran matándonos unos a otros y dándole la oportunidad al enemigo real de intervenir en el país a costa de más sangre de pueblo inocente. Todo esto, por que alguien desde un ministerio o de una oficina o de una magistratura, no puso un freno a tiempo, tal vez por temor a exacerbar al enemigo que nos está atacando permanentemente. Creo en la estrategia, pero no en la impunidad que nos está corroyendo
Volviendo al inicio: si el Estado no cumple con su obligación legal, entonces el pueblo habrá de tomar las acciones necesarias, en base a los preceptos constitucionales que, se los especifican claramente. Después no llamen al pueblo anarquista o infiltrado ,o agente de la CIA. QUIEN NO CUMPLE Y HACE CUMPLIR LAS LEYES, ESTA DANDO CAUSE Y OPORTUNUDAD A LA ANARQUIA.
javiermonagasmaita@yahoo.es