La oposición y el gobierno han desplegado diversas estrategias para lograr la selección de sus candidatos a diputados a la Asamblea Nacional para este 26 de septiembre. Pero sin duda, el gran debate ha girado en torno a quienes han sido más democráticos, participativos y plurales en su selección. Además, a este escenario se suma una pretendida “tercera vía” a partir de la ruptura del PPT con el proceso revolucionario. Este interesante panorama nos hace generar un par de reflexiones.
1.- Cada día más la democracia, en su sentido etimológico, se impone sobre la representación poliárquica, esto quiere decir que aún cuando la oposición ve en la vía de la “dedocracia” la solución más viable a sus conflictos internos, sin embargo tienen que “bailar la danza bolivariana de la democracia participativa”, y aún no queriendo han tenido que dar espacio a la elección por las bases de algunos de sus candidatos. Sin embargo es irónico que los nuevos críticos del proceso, que acusan al presidente Chávez de tirano, el PPT, hayan elegido a sus candidatos de manera menos democrática aún que la MUD, en pocas palabras, todos a dedo.
2.- La identificación y reconocimiento de los liderazgos locales y sectoriales, sigue siendo un deseo difícil de realizar, sin embargo, los candidatos del PSUV son candidatos que en su mayoría viven o se identifican ampliamente con la vida cotidiana del circuito donde fueron escogidos, esto es indicador del desarrollo del sentido de pertenencia y de conciencia comunal de nuestra población. En este punto es importante destacar que este requisito de identidad geográfica es imprescindible en el momento de someterse a la decisión popular, y obliga a una nueva forma de hacer política de políticos identificados con lo local. Lamentablemente esto limita la participación de sectores no georeferenciados, como intelectuales, académicos, trabajadores, deportistas, artistas, etc. Esta distorsión, se ha pretendido subsanar a través de la vía de la elección de los candidatos por lista, cuya elección ha sido reservada por todos los bandos a las direcciones de sus organizaciones. Parece entonces que por ahora la democracia al 100% aún no es viable, y esto es aceptado en la práctica por todos los actores políticos venezolanos, a pesar de sus discursos.
Al final, pareciera triunfar la democracia pero con algunas limitaciones del modelo que presenta imperfecciones que han sido corregidas parcialmente, cada sector a su estilo. Los venezolanos seguimos apostando por más y mejor democracia, que pareciera es el valor que además está en juego el próximo 26 de septiembre. Si a partir de las acciones, más que por sus discursos, podemos juzgar y valorar para tomar una decisión en cuanto a quienes elegir o por quien optar, recomiendo que se juzgue el valor democrático de los actores en pugna, y si usted cree realmente en la democracia, compare y tome su decisión después de algunas preguntas: ¿Quiénes han demostrado estar más apegados a los valores democráticos de nuestra Constitución?, ¿Quiénes han dado mayor participación a diversos sectores sociales?, ¿Quiénes han dado mayor oportunidad para participar?, ¿Quiénes han respetado la decisión sus militantes?, ¿Quiénes profesan con su acción más y mejor democracia?, usted decide.
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