La oposición tiene 11 años utilizando la estrategia de invalidar todo lo que hace el Gobierno de Chávez, el sólo hecho de que el Presidente anuncie una idea, ya es motivo para que enfilen sus baterías en contra.
Chávez habló sobre la necesidad del ferrocarril de Venezuela, y la oposición lejos de participar con ideas y propuestas, enfiló contra el Plan Ferroviario Nacional todos sus odios y profecías catastróficas. Hoy miles de kilómetros de rieles surcan, cambian y unifican la geografía del país, y pronto tendremos el Gran Ferrocarril de Venezuela.
La oposición ha construido su agenda política desde la hostilidad y la fuerza, ésta tuvo su clímax con el golpe de Estado de 2002 y el saboteo petrolero, cuyo saldo fue: decenas de muertos, heridos, y pérdidas netas por ingresos petroleros cercanos a los 22 mil millones de dólares.
Los medios de comunicación en manos de la oligarquía, cómplices de esta estrategia de hostilidad y violencia, manipulan a la opinión pública, local e internacional, para hacer creer que la hostilidad la origina el Gobierno y el Presidente Chávez, sometiendo a la población a tensión permanente, sin paz ni sosiego.
Se han identificado claramente a algunos medios (Radio y TV) como la caja de resonancia que le da vida a esa oposición de espectros, sin decoro y sin ideas. Esta Revolución ya ha aportado suficientes mártires, el pueblo no merece más sacrificios por causa de una libertad de expresión burguesa.
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