Memoria y cuenta. Si duda, el discurso de la memoria y cuenta presentada por el Presidente a la Asamblea Nacional este sábado 15, pasa a ser un hito determinante del accionar ético y político para este año y el venidero. Estoy convencido que los diputados de oposición quedaron desarmados ante la elocuencia de un Presidente que además de su presencia respetuosa y tolerante, supo hilar fino los dilemas políticos, sociales y económicos, basado en una estructura de discurso que reconoció una serie de crisis (naturales) y errores (en política pública) cometidos el 2010, que derivaron en cifras deficientes en alguno de los indicadores más importantes, pero a su vez logró que se comprendiera el gran esfuerzo por mantener e incrementar el beneficio social a través de políticas públicas orientadas principalmente al ser humano. Estoy seguro que el elemento determinante del discurso estuvo centrado en la afirmación: “ustedes no son enemigos son adversarios políticos”, al referirse a los sectores de oposición representados por los diputados que estaban presentes, convocándolos a deponer la confrontación estéril para así asumir un debate de altura basado en ideas y propuestas y no en descalificaciones, cosa que estoy seguro debe ser emulada por los parlamentarios del proceso que han caído en la tentación de la descalificación personal. Por otra parte, la convocatoria al debate cara a cara con la oposición y el llamado a sus Ministros y dirigentes del PSUV a asumir este reto, hace que más de uno que le rehuía a la confrontación tenga que asumir que, o lo hace, o desaparece políticamente, ya que nos encontramos en un momento histórico donde el debate se convierte en la piedra angular de la democracia venezolana. Sí creo que debemos lamentar la postura de Julio Borges que al pretender tomarle la palabra al presidente le solicitó que se callara para iniciar el debate, error político que evidencia la incomprensión del momento histórico y político y su rol ante el país, creo que esto permite entender porqué su aspiración presidencial ha sido mermada por sus propios colegas y partidarios de oposición. Pero a pesar de ese episodio, debemos reconocer a un diputado Ramos, con mucha más audacia política formulando una propuesta que fue escuchada por el Presidente, permitiendo así que se fijara la acción para ser evaluada, sólo Ramos supo aprovechar la oportunidad de oro presentada por el Presidente, quizá porque era el único diputado de la oposición que verdaderamente tenía una propuesta, mientras el resto no, ya que ese era el escenario para presentarlas al país y perdieron esa extraordinaria oportunidad. Puedo estar seguro que la actitud de la oposición, a pesar de la generalizada conducta respetuosa, trajo un efecto adverso en sus seguidores que sumado al discurso crítico, propositivo e incluyente del Presidente, hizo repuntar unos cuantos puntos en su apoyo y una fuerte disminución de puntos en el apoyo de la oposición, esto lo veremos en las próximas encuestas sin duda. Podría resumir la apreciación sondeada en algunos grupos de base del proceso que mostraron algún descontento en los últimos tiempos con la siguiente frase: “Ese es el Chávez por el que voté”. Superintendencia de Costos y Precios. La propuesta principal en lo económico del Presidente en su memoria y cuenta fue la creación por vía Ley Habilitante de la Superintendencia de Costos y Precios que estoy seguro vendrá a complementar a la muy positiva gestión actual del INDEPABIS en la acción del Estado contra la especulación. La estructura económica venezolana en las últimas cinco décadas, como consecuencia de la cultura rentística petrolera, ha devenido en una condición especulativa producto de la alta circulación de dinero no respaldado por el esfuerzo productivo concreto traducido en fuerza de trabajo. Esto ha conducido a generar altas tasas de ganancia y búsqueda de un rápido enriquecimiento de los sectores empresariales y comerciales del país, acostumbrados al subsidio del Estado para el mantenimiento de su acción económica. La fijación de una Tasa Variable Máxima de Ganancia por Rubro (para el estímulo productivo), política determinada por el Estado, que tendría como fin establecer el porcentaje máximo de ganancia del productor, importador, comercializador y vendedor al detal de todos los productos de consumo, estableciendo estos porcentajes de ganancia en beneficio del productor y en menor proporción al importador; sumado a la creación de una instancia de alto gobierno que con amplísimos niveles de tecnificación, permita el registro de los procesos productivos y comerciales del país para supervisar así el cumplimiento de la Tasa Variable Máxima de Ganancia por Rubro a través de un Sistema Nacional de Información de Precios, sin duda pondría en su justo lugar a un modelo socialista en el siglo XXI que sin generar un control directo de precios de venta, sin embargo permitiría al Estado mantener un permanente monitoreo de procesos productivos y comerciales para así no sólo actuar producto de la denuncia de los afectados por la especulación sino actuar por tener la capacidad de conocer todo el proceso productivo o de importación para detectar a tiempo cualquier marcaje que sobreprecie las mercancías afectando a los ciudadanos. Cara o Sello por RNV-Activa vuelve el próximo miércoles 26 de Enero, reabriendo un escenario público de debates entre dos formas de ver al país, de 8 a 10 p.m., junto a Farith Fraija, Heiber Barreto, y Rubén Mendoza.
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