Para cada bando político la acción terrorista sucedida
en la Plaza Francia de Altamira tiene culpables a
priori. Para unos, se repite el mismo esquema del
golpe del 11 de Abril, mientras que otros asumen que
se trata de una acción para amedrentar a la oposición.
Ahora bien, tratemos de pensar sin caer en la trampa
emocional cuáles son las posibilidades: 1)acción
promovida por el gobierno, 2) acción realizada por
partidarios de uno de los 2 bandos sin conocimientos
de dirigentes, 3) acción promovida por sectores
radicales de la oposición.
Para justificar la primera opción, se invoca la
versión opositora de los hechos del 11A, donde se
pretende afirmar que es la línea propia de un gobierno
"castro-comunista" que no acepta críticos y que no
conoce otros medios que la violencia. Sin embargo,
esta explicación carece de sentido, pues la lección
está justamente en los sucesos del 12-13 de Abril. Qué
beneficio puede obtener el Gobierno de una acción de
este tipo? Evidentemente que ninguno, pues la
hipótesis que este tipo de acciones sirven para
amedrentar se cae por si sola. Al contrario de lo que
se desearía, estos acontecimientos alientan a la
oposición a tomar acciones de calle, como
efectivamente está sucediendo actualmente.
Adicionalmente, es claro que si se llegara a comprobar
la responsabilidad de sectores oficialistas, la caida
del gobierno sería inminente. Todo esto daría pie para
descartar esta hipótesis o, al menos, a considerarla
como poco probable.
La segunda hipótesis no puede ser descartada tan
fácil, pues siempre es posible que gente irresponsable
de uno u otro bando pretendan tomar acciones pensando
que favorecen a su grupo político. Sin embargo, hay
que tomar en consideración que las descripciones
manejadas hasta los momentos, según información
difundida por los medios de comunicación, hacen
indicar que se trata de una acción comando.
Finalmente, la tercera opción es la asumida por los
sectores afectos al gobierno. Esta hipótesis tiene
bastante sustento, dadas las reiteradas denuncias que
se han venido realizado a través de los distintos
medios. Adicionalmente, en lo personal, recibí esta
tarde una llamada de un familiar indicándome que se le
había informado que esta noche habría que mantenerse
en casa y no salir. La persona que había dado la
información resulta ser madre de empleados de PDVSA,
muy activos en acciones de oposición. Todo esto hace
parecer "evidente" que se trata de un autoatentado por
parte del sector radical de la oposición que busca una
salida violenta a la actual coyuntura política que
vive el país.
Sin embargo, de ser cierta esta última opción, no sólo
deben ser castigados los autores materiales e
intelectuales de estos asesinatos, si no también los
sectores de inteligencia y seguridad que no habrían
cumplido su cometido, tanto nacionales como locales.
Finalmente, aunque cada uno de nosotros podamos tener
una postura a priori sobre la responsabilidad de estos
hechos, es condenable la actitud de los medios y demás
dirigentes de oposición que están incitando
directamente a la violencia en contra de los sectores
oficialistas. En el reporte que hace Unión Radio sobre
el hecho se incluyen declaraciones irresponsables
llamando a la insurrección civil y militar, dictando y
sentenciando a culpables sin las debidas
investigaciones. En la radio (La Mega) está inculpando
directamente al gobierno, declarando que fue un grupo
comando, dirigido por Eliécer Otaiza. Por el
contrario, las responsables y pausadas declaraciones
emitidas por el Vice Presidente de la república, quien
no cayó en el juego de señalar con el dedo sin tener a
disposición la debida investigación, son dignos
ejemplos a seguir por quienes pretenden incitar a la
violencia contra los simpatizantes del gobierno.
Saludos,
Hermann Albrecht