Todos conocemos, en Venezuela, las causas que abrieron el camino a la
Revolución Bolivariana. La depravación de los líderes de la derecha, su
corrupción descarada, el hambre, la miseria, los sin techo, el atropello
a los ancianos, las barraganas, el desempleo, los estudiantes sin cupo,
el cipayismo, la represión y la impunidad convirtieron a uno de los
países más ricos del continente en una caricatura de país.
Surge de allí, de esas condiciones vergonzantes, la consigna del pueblo
NO VOLVERÁN”, pero ellos insisten y luchan por volver, agrupados en
partidos con nuevos nombres pero con prácticas peores a aquellos que
originaron las ya mencionadas situaciones. Peores porque ahora le suman
el fascismo como práctica política, característica que no poseían ad, ni
copei (así en minúsculas).
Que lo anterior sirva de introducción para el tema sobre el cual queremos
reflexionar (brevemente, por supuesto) en esta oportunidad: El papel de
la derecha en la historia política de Venezuela en los últimos 60 años.
Lo que hicieron, lo que generaron y el mal causado antes de la aparición
del gigante Hugo Chávez es harto conocido y tan lamentable, que los
propios dirigentes de esa época y los nuevos surgidos bajo su ideología y
práctica política, engañosamente marcan distancia de la IV manifestando
en todos los escenarios que le es posible, su intención de no regresar a
ella y no repetir la práctica política de los delincuentes que dirigieron
ad y copei.
Lo que nos interesa, entonces, destacar es el papel jugado por la derecha
desde la implantación de la V República.
Resulta innegable (sólo los necios osan ponerlo en duda) que Venezuela ha
logrado un crecimiento económico, político y social en los últimos 15
años. Negar que el pueblo tiene mejores condiciones económicas, mayores
oportunidades de estudio, más y mejores oportunidades de empleo,
oportunidades de adquirir vivienda, mejores condiciones de vida en la
ancianidad, más democracia y pare de contar, es propio de una ignorancia
gigantesca o del cinismo que siempre ha caracterizado a la derecha. Sin
embargo, la nación ha vivido desde 1999 varias crisis que han impactado
severamente su estabilidad política, económica y social.
Todas esas crisis, absolutamente todas, han sido planificadas e
impulsadas por los mismos actores políticos y económicos que se
transformaron en amos del país en el siglo pasado, con los resultados ya
conocidos.
La primera gran crisis la impulsó la oligarquía venezolana a través de
sus partidos, sus medios y por supuesto sus actores económicos. Comenzó
en los meses previos a diciembre de 2001 con una huelga general a lo que
siguió la conspiración de PDVSA, otro paro general y un golpe de Estado.
Nadie, debería desconocer el daño que el Estado y la población venezolana
sufrieron gracias al accionar de esa cuerda de malandros que dirigen la
derecha venezolana. Allí están, para la historia, los indicadores que
demuestran cuanto se incrementó la inflación, cuanto el desempleo, cuanto
la pobreza y cuanto se derrumbó el PIB.
Poco o nada le importó a esa derecha bastarda, las consecuencias de sus
acciones. De inmediato se montaron en otra conspiración. Las guarimbas,
el sainete de Altamira y la barbarie del paro petrolero hicieron
retroceder todos los indicadores económicos y sociales del país a la
época de la IV República. Por la borda se fueron años de trabajo, lucha y
logros. Retrocedimos 10 años gracias a los mismos de siempre.
Los mismos que cuando se les toca el tema piden que dejemos de hablar del
pasado y miremos al futuro.
El futuro, sin embargo, pasa por el hoy y hoy nuevamente la derecha
impulsa y promueve otro ataque contra el pueblo, esperando que éste culpe
al gobierno de sus penurias y le retire el apoyo que lo sustenta.
La estrategia la conocemos todos. Bajan la producción de productos de
consumo masivo, los acaparan, especulan con los precios y los
contrabandean.
Si alguien tiene duda quienes planifican la estrategia hambreadora que
busque en las declaraciones de los mismos sádicos de siempre alguna
sugerencia para resolver el problema o una censura a quienes a través del
hambre quieren doblegar al pueblo.
En resumen, Venezuela vivió penurias en la IV y ha pasado momentos muy
difíciles en la V, pero todos son consecuencia del accionar inmoral,
fascista y antipatriótico de una derecha cuyo único objetivo es tomar el
poder para dejar atrás lo que llaman “populismo” y reimplantar las
condiciones de subordinación y cipayismo que siempre mantuvieron con los
gringos.
¡Qué el que tenga ojos, vea!