Luis Ugalde público en el diario El Nacional en fecha 11 de septiembre del año en curso un artículo que lleva por nombre, “Agonía y Unión Nacional”, comienza reflexionando en torno a su esperanza de que el gobierno de Maduro adopte “medidas dolorosas” para el pueblo, sin importar sus consecuencias, dice: “El gobierno está atrapado….y es incapaz de tomar algunas medidas inevitables y muy dolorosas….. Aplazamiento de decisiones imprescindibles”. ¿Cuáles medidas aspira el señor Ugalde?, Prefiere guardar silencio, mejor no lo sepa el pueblo, no vaya ser que se desacralice, pierda fe y confianza en “el califato de la iglesia y sus instituciones católicas educativas. Pues sucede que la iglesia siente “agonía” por el gobierno de Maduro, por las medidas de ajustes en congruencia con “el modelo económico, social y político en el que están empeñados” construir en Venezuela, es decir el socialismo, están preocupados por “los controles del gobierno” hacia “las empresas privadas del capitalismo” ya que él “fomenta las causas de los problemas”, ¿Cuáles problemas, los de precios de las mercancías, de producción, o de venta en el mercado, incluyendo, la especulación con los bienes importados?¿Es responsable el gobierno o la empresa capitalista privada?
Ve en la propuesta de Chávez, las razones de fondo de la agonía: “el discurso de Chávez, es que la empresa privada (capitalista, el paréntesis es mío) es en esencia irremediablemente una realidad inhumana y criminal, basada en el robo de la plusvalía y producto de la sangra del obrero”. ¿No puede comprender esto el Señor Ugalde, esta verdad elemental de la economía política?, prefiere negarla y estigmatizarla, prefiere desconocer las causa de la agonía social, cómo la escasez, el desabastecimiento y la especulación inflacionaria del mercado, cuyo origen está en el robo de la plusvalía”, en la explotación del trabajador, frente a la cual el gobierno reacciona con los controles, como es su deber, controlar los precios, el abastecimiento y la producción. ¿Qué esperaba el señor Ugalde, milagros? Al parecer Ugalde cree que estos controles son soluciones ““erradas, destructivas y fracasadas en todas las sociedades que la impusieron”. Como vemos desea que el gobierno se vea “atrapado en su propia red”, no quiere controles, prefiere libre mercado, libertad de precios, de producción, y de venta sin importar si los precios son justos, los productos de calidad o si el pueblo tiene acceso o no a los bienes básicos de consumo.
Todos estamos consciente de que el pueblo venezolano quiere “un cambio radical” y no un milagro, no lo pone en duda ni siquiera “la agonía de Ugalde”, pero ese cambio no es precisamente de derecha, doloroso para el pueblo, opuesto al gobierno del Estado, sino sustentado en la libre empresa capitalista, desregulada de los impuestos, en libertad de especular jugando con el hambre del pueblo. De allí que analizando “el discurso de Chávez”, diga el señor Ugalde que: “Para construir el comunismo de la felicidad la clave sea la eliminación de la empresa privada; cuanto antes, mejor. Para eso el Plan de la Patria”. ¡Vaya verdad!. Sin embargo; se debe decir que ni siquiera en el comunismo, “la empresa privada desaparece”, eso si la empresa privada capitalista, la empresa no asociada, individualista, explotadora del trabajo ajeno.
Asimismo; estamos conscientes de que las empresas individuales y sociales son necesarias para cualquier sociedad, pero las privadas, las capitalistas son “inhumana y criminal, basada en el robo del trabajador” de allí la agonía de la crisis de la sociedad, pese a ello, se reconoce que toda empresa debe alcanzar “ganancia, productividad y el profesionalismo” del trabajador, sin embargo, el señor Ugalde cree que el socialismo sataniza estos elementos al controlar la ganancia. Nada más lejos de la verdad, toda empresa obtiene productividades en la medida que se perfecciona las fuerzas productiva del trabajo (profesionalización), sin embargo no se explica el comportamiento de la empresa privada capitalista que elevando la productividad, no aumenta el salario, solo la ganancia, en todo caso niega la intervención del gobierno para elevar el salario y regular la ganancia.
¿Qué pasa si los empresarios privados, no elevan el salario? La productividad del trabajador es capaz mediante las empresas saturar de bienes el mercado, pero no ocurre así hoy, porque las empresas no producen, importan, especulan con los precios, destruyendo, robando al trabajador, condenándolo a la miseria, estas son “las medidas dolorosas de Ugalde”, la reducción del gasto del trabajador, la extracción más elevada de la plusvalía mediante la intensificación de la productividad, elevando la acumulación de la empresa privada capitalista por la vía de los precios altos, aprovechando la escasez y el desabastecimiento producto del contrabando, es decir los propios viscerales vicios neoliberales del capitalismo.
Lo extraño del señor Ugalde es que nos deja con una duda, luego de haber descubierto lo que es la plusvalía, nos dice “La prédica chavista demonizó tres elementos básicos de toda economía: la ganancia, la productividad y el profesionalismo….. Desde luego, toda sociedad debe discutir cómo y para qué la ganancia, la productividad y el profesionalismo y acordar solidariamente (pacto social) la sociedad justa, digna y libre que quiere compartir para beneficio de todos”. ¿Será que la agonía enfebreció al señor Ugalde?. Ya sabemos que la revolución bolivariana no ha demonizado la ganancia, eso le ha colocado un tope del 30% según la ley de precios justos, por encima es especulación, por otra parte, el presidente Maduro nos ha hablado de elevar las fuerzas productivas, lo que equivale a elevar la productividad del trabajo, el profesionalismo de la clase trabajadora, ¿Pero que diga asombrosamente Ugalde “toda sociedad debe discutir cómo y para qué la ganancia, la productividad y el profesionalísmo? ¿A qué sociedad se refiere, a los trabajadores o aspira revivir “la tripartita” entre gobierno, empresarios y trabajadores?.
Todos sabemos el daño ocasionado por la Tripartita en el pasado, es más la llamaban “la trimaldita”, se negociaba el salario de los trabajadores a espalda de ellos mismos, pero porque propone Ugalde abrir a las empresas privadas capitalista a ¡la posibilidad de que “la sociedad” revise las ganancias (plusvalía), grandiosa idea, a ver si las empresas cumplen y adoptar medidas de ajuste dinámico del salario de acuerdo a la productividad del trabajo. Un gran iluso el señor Ugalde, o mejor mal intencionado, atrapados en su propia red de los vicios capitalistas “estatistas-gobiernista” de manera que mal haría criticar a Maduro por tener “un presidente con renta petrolera y buen corazón que nos ama y nos regala…”. El petróleo es nuestro y hacemos con él lo que debamos hacer, elevar el profesionalísmo del pueblo a través de las Misiones, entonces; ¿Porque Ugalde “combate contra un modelo político y económico” que solo sabe hasta ahora, redistribuir la renta petrolera? ¿Es suicida, antidemocrático y anticonstitucional apoyar al pueblo? Creo que el señor Ugalde es “cómplice por omisión”.