Transcurría el año 93 y un debilitado Carlos Andrés Pérez, que ya había ordenado masacrado al pueblo durante el “Caracazo” e implocionado (así, como todas las Instituciones de la cuarta República) por la insurrección de los COMACATES el “4 de Febrero” perdiendo todo el apoyo de la “sociedad civil” y sufriendo la traición de su partido, AD, declara sobre el “Autosuicidio” refiriéndose a los ataques en su contra, que terminaron enjuiciándolo por malversación de fondos (denuncia realizada por cierto por José Vicente Rangel) por el desvió de dineros de la partida secreta para apoyar la candidatura de violeta chamorro en Nicaragua.
Hoy con asombro, vemos al mejor estilo de Salvador Dalí, una “rueda de prensa”, donde las esposas de Leopoldo López y Daniel Ceballos, queriendo continuar llenando el expediente atroz de las violaciones de los derechos humanos que el Presidente Maduro le impone a sus opositores, afirman, que sus esposos y los otros políticos presos, Salvatore Luchesse y Enzo Scarano, reciben tratos crueles y atroces como; guerra nocturna con bombas de excrementos contra sus celdas, (el director de la cárcel, Homero Miranda, obliga a los soldados a deponer en bolsas para lanzárselas) cortes de luz y agua, para que no puedan ver los ataques ni lavar, ni asear sus dormitorios, ni a Ellos mismos, si son alcanzados por algún fétido proyectil.
La vejación sistemática contra estos demócratas es tal, que soldados inescrupulosos se dan a la tarea de robarles el sueño en las noches, tocando pitos, sirenas, disparando, y hasta torturarlos psicológicamente con canciones socialistas y la repetición sin fin del himno del PSUV. Esto violaría toda norma internacional sobre los derechos humanos, acuerdo de ginebra y los tratados intergalácticos. Extrañamente no mostraron ningún video o fotos que le sirvieran de PRUEBAS e insumo para los guerreros del teclado.
Este nuevo montaje de los radicales de la oposición, es más torpe que el que trato de vendernos hace unos días, la alcaldesa de san diego, quien afirmaba haber sido humillada y secuestrada en la cárcel de ramo verde, por el solo hecho de exigir los exámenes médicos de su esposo. Contrariamente la vimos despedirse sonriente de los custodios y guardias nacionales informe en mano, en un video donde sale de la habitación de su esposo, Enzo Scarano.
Ojala y estos políticos presos, frenen a sus esposas en su afán por montar y documentar expedientes de abusos y violación de los derechos humanos, no vaya ser que como la Afiuni, declaren a destiempo, que fueron abusados en la cárcel de ramo verde.
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