El señalamiento del presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, según el cual, 11 candidatos de la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) tienen antecedentes policiales, es digno de analizar con respecto de la honestidad y transparencia de las próximas elecciones del parlamento. Especificó que cinco son de Voluntad Popular, uno de Acción Democrática, uno de Primero Justicia, uno de Proyecto Venezuela, uno de Copei, uno de Un Nuevo Tiempo y uno de un partido de Anzoátegui.
Cabello no dio nombres -por respeto a sus familiares dijo en sus mazazos- sin embargo detalló los antecedentes de cada aspirante. La MUD y líderes opositores obviamente saben quiénes son, pero callan como han callado siempre, cuando más bien deberían tomar acciones de saneamiento e informar los correctivos a la población con responsabilidad, porque a nadie –ni a opositores ni a chavistas- les conviene que diputados, dirigentes, funcionarios, sean políticos de dudosa reputación. La corrupción ha sido uno de los problemas que ha causado más daño a Venezuela, tanto en la IV como en la V República.
En tal sentido, el mazazo de Cabello no se debe ver como una simple descalificación propia de períodos comiciales, verlo así sería una tontería que no ayuda en nada a la Patria de Bolívar en su lucha en contra de la corrupción; en mi criterio esas declaraciones se deben asumir como una invitación de saludable honestidad; un llamado sin titubeos a poner las cartas sobre la mesa, con respecto de la solvencia moral de los candidatos al parlamento y a cualquier cargo de elección popular cuando se presente. Vamos a ver quién es quién, incluyendo a los del Psuv, por supuesto. Así se plantearía una manera honrosa de contribuir con el país, sin caer en los irresponsables descréditos que se ponen de moda en las fechas de votaciones como forma de hacer campaña.
Por lo demás se sabe que hacer silencio o hacerse el ciego acerca de la escogencia de personas para puestos claves, que han sido denunciadas en hechos que riñen con las buenas costumbres, es una vergüenza, un atentado en contra del pueblo. La invitación entonces es a levantar la voz en estos casos como lo hizo Cabello, sin llegar a las penosas descalificaciones sin fundamento que al final se revierten.
En una oportunidad lo dije y lo vuelvo a repetir: ya en Venezuela han causado lesiones demasiado graves gobernadores bandoleros, alcaldes vagabundos y directivos que se enquistan en las instituciones y ocupan funciones de alto nivel y terminan siendo tremendos bandidos. La gente, sobre todo la más pobre, paga con creces las terribles consecuencias.
Pero bueno allá la MUD, en el caso revolucionario se debe ser severo con la aplicación del artículo 13 del instructivo de postulación de candidatos a las primarias del Psuv, específicamente en el aparte 2 el cual dice: "La Dirección Nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela podrá excluir a cualquier aspirante que no reúna las condiciones éticas, morales y políticas para ser candidato o candidata a diputado o diputada de la Asamblea Nacional".
Así se amarraría a la oposición, la MUD no tendría motivos para hacer un señalamiento en contra de los candidatos rojos rojitos, como el que Diosdado Cabello hizo en contra de ellos. Es más: los chavistas ahora con esas declaraciones del presidente de la AN, están obligados a presentar los hombres de conducta más intachables para las primarias… Y con el triunfo seguro eso sí sería altamente beneficioso para la revolución y el país.