Recuerdo que cuando era pequeño, una vecina en el barrio, criaba gallinas en un terreno microscópico que poseía.
Era una familia muy humilde, como la mía. Las gallinas le daban huevos, que vendía a sus vecinos y también a veces las mataba, para vender su carne.
Si casualmente, en alguna ocasión presencié la ceremonia, de retorcerles el cogote y separarles la cabeza del cuerpo, de un solo golpe de hacha, esa imagen me persigue todavía.
Recuerdo que mi vecina comprensiva, me decía, "no mires, si te asusta". Y por las dudas, para tranquilizarme agregaba, "no sufren, yo les corto la cabeza tan rápido, que ni se dan cuenta".
Lo que es la asociación de ideas, en el cerebro humano, increíble. El cerebro humano en eso de asociar ideas es genial .Vean Ustedes…
Este recuerdo de mi infancia, se me cruzó ayer, cuando leía lo de la expropiación, del Depósito de la Polar.
Y pensé por un momento, que si mi vecina estuviera, en el lugar del compañero Maduro, seguramente ya le hubiera cortado la cabeza a la Polar, de un tajo. Y el pueblo venezolano, no tendría a que asistir, al interminable y desagradable episodio, de apenas amenazarla.
Compañero Maduro, la Polar para el pueblo venezolano, simboliza la provisión de alimentos tradicionales.
Pero en la realidad política y económica, representa la repugnante cara de la oligarquía más explotadora.
Se burla del pueblo y del gobierno Bolivariano, de todas las formas posibles.
No hace más de 3 meses, me publicó Aporrea un artículo con este título: Polar. "El Gobierno, arrodilla a 30 millones de venezolanos, ante un empresario oligarca innecesario" http://www.aporrea.org/oposicion/a206678.html, en el cual le planteo las razones, por las cuales es necesario con toda premura, confiscar a la empresa y ponerla en manos de sus trabajadores y técnicos, que la manejan actualmente.
Las razones son simples y prioritarias, Polar es una empresa de fácil conducción, no produce productos complejos, que puedan hacer de su producción un problema técnico.
No es Lorenzo Mendoza quien los produce, son sus técnicos y empleados, los cuales tienen en sus manos, los métodos que se emplean.
Pero produce alimentos, que son de uso masivo y juega un papel vital en la guerra económica, que como bien dijo Ud. Compañero, se halla desde hace tiempo, en guerra contra el país bolivariano.
No existe razón alguna lógica, para no confiscarla de inmediato… a no ser que siendo una de las empresas privadas, que más divisas (dólares) recibió y recibe del gobierno Bolivariano, actúa en la realidad simultáneamente, como productora de alimentos y en especial, como intermediaria en el manejo de las divisas, que son propiedad de todo el pueblo venezolano.
Y es probable, que esos burócratas de su Gobierno, que manejan la provisión de divisas, a la oligarquía privada y que se han enriquecido, con el usufructo de los dólares , que han ayudado a fugar miles de millones de dólares, estén interesados en no interrumpir el negocio y son que los que seguramente, aconsejan no expropiar la empresa Polar.
Por ahí está la cosa compañero Maduro, ninguna otra excusa es válida, para no confiscar y estatizar, la empresa Polar, es una de las empresas que en este momento, más necesitaría el gobierno, manejar directamente, como es el caso emblemático de PDVSA.
Porque con la expropiación de unos galpones solamente, por más justas razones que lo justifiquen, solo se irrita y se le da armas a la empresa, apoyada en su propio aparato propagandístico, para confundir al pueblo y a los propios trabajadores.
Compañero Maduro, expropie la empresa Polar toda y ayudará así al pueblo venezolano, a vivir más tranquilo sin colas ni desabastecimiento, y le quitara a la oligarquía venezolana, armas fundamentales en contra del proyecto, que tanto soñó el Comandante Chávez.