La lujuria reflejada en la súbita cercanía a la riqueza, la abundancia, el lujo y la vida superflua, se apoderó del clan Guaido desde incluso meses antes de Enero de 2019, cuando desde los comandos de ciertos partidos de la oposición y los llamados "think tank", se afinaban las acciones que en firme se llevarían a proponer al departamento de estado para su acción definitiva. Tal y como sucedió durante el sabotaje petrolero de 2002; aunque en una versión más enfocada, la planificación de dichas acciones se centraría en PDVSA y sus activos. El objetivo estaba claro; crear la mayor suma de conmoción política, social y financiera. Cerrar el grifo de divisas mediante el colapso total de PDVSA y sus filiales, promover y apoyar sanciones radicales que pongan a esa gruesa porción dependiente de las ingratas dadivas del gobierno, a ahondar en sus penurias, hambre, necesidad y escasez. Atizar la confrontación desde países vecinos que como Colombia, han vivido históricamente de lo que extraen de Venezuela, porque parasitan y siempre han parasitado en Venezuela con la traidora complacencia de políticos y militares. Nada distinto al caso de Cuba.

Llegado el 28/01/2019, se agudizan las sanciones ya iniciadas desde 2015. Unos meses después se comprobaría que en esos 6 meses, el daño real no ha sido nunca sufrido por el gobierno de Maduro, sino por el pueblo más necesitado. Dichas sanciones probarían fallidas e incapaces de dañar al gobierno, tal y como se reconoce desde la misma casa blanca. Estos "seudo-Venezolanos" aglomerados en torno a la oposición y que pretender ser poder, se han sentado con intereses foráneos, con políticos y con militares extranjeros, a conspirar; a compartir secretos de estado e información estratégica en contra de su propio país y con el único propósito de lograr el poder. Que es entonces lo que critican a Maduro?

Por supuesto que para el clan Guaido ha habido mucho que celebrar. Celebran la toma de todos, sino la gran mayoría de los activos Venezolanos en el exterior para su exclusivo goce y disfrute personal, incluyendo Citgo, Monómeros filial de PDVSA en colombia, Reservas en oro, Cuentas de la nación en distintos países y sobretodo del disfrute pecuniario de la intermediación financiera y particularmente, política.

Celebran la acción complaciente a los intereses financieros/testaferros/socios, del pago de los intereses del bono 2020, pago innecesario ante la posibilidad que tenían de solicitar protección federal. Celebran millonarias comisiones percibidas de la firma de préstamos mil millonarios otorgados a Citgo. Celebran la corrupción producto del saqueo de los dineros de la llamada vergüenza (ayuda) humanitaria, promovida vilmente en contra de Venezuela desde las aristas de la degradada oposición. Nada de ello es producto de la casualidad. Esa avariciosa oposición ha probado que se hunde en corrupción. Ha probado que su interés no es el bienestar de Venezuela, sino el suyo propio. Ha probado que mancillar, embarrar y vilipendiar el buen nombre de nuestra patria no les importa y ha probado que no les duele el sufrimiento del segmento más humilde de Venezuela.

Aunque matizado en un verbo pasivo y algo mimetizado con lo folklórico, el mismo Diego Arría; de quien no comparto la tesis de la invasión militar, lo reconoce en cierta medida al [https://konzapata.com/noticia/71850/konfidenciales/diego-arria:-la-boliburguesia-no-puede-ser-la-bisagra-del-cambio.html] afirmar que; ‘’ Es un hecho grave… Más que el escándalo de los recursos (DOLARES) mal manejados (ROBADOS) en Cúcuta. Más que el caso del diputado drogado el día en (EN EL PROSTIBULO) que iba a entrar la (VERGÜENZA) ayuda humanitaria. Es grave, señala, que la boliburguesía y los bolichicos financien dirigentes políticos de la oposición. Y financien parlamentarios".

Como entender que el foco de esa precaria oposición se centra en supuestos 4 millones de emigrantes; que no lo son, cuando a través de las criminales sanciones se somete a 28.000.000 de Venezolanos que escogieron permanecer en su país, al hambre, a la falta de medicinas, electricidad y gasolina. No son 4 millones de emigrantes Venezolanos, porque dentro de ese total hay una gruesa porción que son extranjeros de vuelta a sus terruños. No son 4 millones de emigrantes Venezolanos necesitados porque dentro de ese total pulula una gruesa masa de profesionales que tanto antes de Chávez como ahora, decidieron irse de, o encontraron mejor futuro fuera de Venezuela. No son 4 millones de emigrantes Venezolanos necesitados, porque dentro de dicho total existe un volumen significativo de mil-millonarios, Boli-burgueses y ex políticos, que con sus botines han huido del país a radicarse en Europa y Estados unidos. A quien engañan?

El mimos reporte de ACNUR reconocía ya hacia finales de 2018 que hay más víctimas de desplazamiento forzado desde dentro de Colombia, que número de habitantes en Costa Rica [https://www.acnur.org/noticias/noticia/2018/12/5c243ef94/hay-mas-victimas-de-desplazamiento-forzado-en-colombia-que-numero-de-habitantes.html]. Pero eso no es nuevo. La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) registra que entre 1969 y 2014, 11.1 millones de latinoamericanos pidieron protección en otro país. El 35.8% provino de Colombia, el país con más solicitudes [https://www.univision.com/noticias/asilo-politico/colombia-encabeza-la-lista-latinoamericana-de-asilo-y-refugio] de refugio/asilo.

A quien se le puede ocurrir que 1.350.000 Venezolanos puede pedir asilo o refugiarse en un narco-país destruido como Colombia, cuando ya para 1979, en Venezuela habían más de 2.200.000 colombianos refugiados. Nuestro país para entonces, erróneamente daba entrada a más de 4.000.000 de extranjeros (censados) solo de Suramérica y sin contabilizar del resto del mundo y los no censados, cuando nuestra población era escasamente unos 12.000.000 de habitantes; es decir, al menos el 33.3% eran solo extranjeros procedentes de Suramérica. Claramente para entonces, más del 50+% de nuestro país eran extranjeros, constituyendo un grave problema de seguridad nacional, por la pérdida de identidad, por la exposición de nuestro gentilicio y por el enrarecimiento y dilución de la cuestión social. Ninguno de nuestros políticos ha sido riguroso y menos celoso con el tema de la inmigración. Ninguno pudo prever las consecuencias que hoy sufre esa nación. Mientras otros países eran y son celosos de asegurar una inmigración necesaria pero selectiva, preparada y que no genere pobreza, en Venezuela armaban un festín con el falso "Mantra" de la hermandad Bolivariana/hispanoamericana; et al. Aprobamos solo la inmigración selectiva y necesaria para construir el país y no como importadora de crimen y pobreza.

De manera que ellos desde la incapaz oposición, dejan de mirar las penurias del 90% de Venezuela, para enfocarse en ese supuesto 10% que no es tal, ya que lo que buscan es infligir el máximo dolor, lograr notoriedad y no, resolver el padecimiento del más necesitado. Ello denota y demuestra más allá de dudas, que esa perversa oposición, no le importa el sufrimiento de las mayorías, solo les importa hacer ruido para lograr hacerse del poder a costa de las vidas de ese 90% de Venezolanos.

Maduro debe salir. Pero su salida no puede pasar por la entrada de elementos corruptos, traidores y manipuladores de la verdad. No vengan con cuentos que estos son más o menos corruptos, traidores o manipuladores que los otros, porque para ello no debe existir medias tintas. Maduro debe salir con la convicción, el apoyo y la unión de las verdaderas mayorías y no con grupitos aislados que se la abrogan falsamente. Su salida debe pasar forzosamente por un proceso constituyente, que garantice luego y "entre otras cosas", la revisión profunda de los entuertos de nuestra constitución y sancione leyes que contemplen la pena capital para crímenes mayores, traición a la patria y corrupción, para que nunca nadie más se lucre del dinero y recursos de todos y de paso burle la ley.

Einstein Millán Arcia: Petróleo y Gas "Upstream"/ Estudios de Especialización a nivel de doctorado en flujo de fluido en medios porosos – The University of Oklahoma, 1991 / Master of Science Petroleum Engineering – The University of Oklahoma, 1990 / Ingeniero de Petróleo Universidad de Oriente, 1979. Ha publicado y presentado en diversas revistas y conferencias internacionales más de 12 trabajos especializados en materia de Petróleo y Gas. Ha escrito más de 250 artículos de opinión y sido citado en materia de petróleo y gas en: Soberania.org, aporrea.org, NoticiasVenezuela.org, Plattsblog, Oilpro.com, las armas de coronel, segurosybanca.com, noticiascandela.informe25.com, The Slush Pit (Oklahoma Oil & Gas News), Energy Economist, La Vanguardia y Los Ángeles Times.