Jose Luís Betancourt (Presidente de los comerciantes de Fedecámaras) explicando que ellos no son explotadores

Jose Luís Betancourt flamante jefazo de fedecamaras, ultimo reducto de la oligarquía, este señor, que ofreció en años pasados tristes espectáculos, al denigrar de nuestro gentilicio, a la vez que cometía delitos , como el de no obedecer las leyes e irrespetar las instituciones que a bien el pueblo venezolano se ha otorgado en innumerables elecciones desde 1998 hasta nuestros días.

Este lacayo, argumento sin ningún aspaviento, solo el que da los medios de comunicación, que los seudo-empresarios son entes dinámicos, y que apuestan al empleo y al crecimiento económico del país, que lejos de la realidad están estos señores, voy a transcribir textualmente algo que profundizara mas el debate y contradice lo dicho por este comerciante¡..

“”Todo esto no es fácil. Se complica aun mas por hecho de que no somos esclavos ni siervos. Somos libres. Libres de obedecer al mando del capitalista .Si, desde luego; pero también, como resultado de las luchas de los esclavos y los siervos, realmente libres de una manera que, a veces, no es conveniente para el capitalista. No puede impedir que vayamos a vender nuestra fuerza de trabajo a otro capitalista si nos cansamos de el. Y tampoco puede( normalmente) dispararnos o azotarnos si no obedecemos a sus ordenes en el trabajo. Los capitalistas requieren el apoyo de una instancia aparentemente externa para aplicar el tipo de violencia que se requiere para mantener un sistema de explotación: El Estado. La separación de Estado y Sociedad, de lo político y lo económico, es otro aspecto muy importante del proceso de separación que es el capital. El estado, como parte del proceso de separación, regula el proceso en si mismo como mejor puede: proteje la separación entre lo hecho y el hacer, el “ ESTO ES MIO” de la propiedad privada, que fractura todo. Todos los sistemas de explotación equivalen a un robo a mano armada; lo peculiar bajo el capitalismo es que la persona que sujeta el arma no es la misma que quien comete el robo.

Todo esto es lucha. Por supuesto que lo es. Es lucha por lo que pensamos, por como actuamos, por como nos levantamos en la mañana y, por lo tanto, por cuando vamos a la cama y que hacemos en la cama; es lucha del despertador, cuando lo arrojamos contra la pared; pero aun así nos levantamos y vamos a vender nuestra fuerza de trabajo. Es una lucha extremadamente violenta en la que miles y miles de personas sucumben cada día porque son excluidas del flujo del hacer y mueren de hambre., por la represión contra los que no aceptan el “ESTO ES MIO” proclamado por los capitalistas, porque lo que el capital les ordena que hagan es letal. Es una Lucha que originan, en primer lugar los capitalistas. Si de nosotros dependiera, nos quedaríamos en cama, pasearíamos todo el día, o nos dedicaríamos apasionadamente a lo que nos gusta hacer. Son ellos los que no nos dejan en paz, son ellos los que nos dicen “Levántate de la cama y ven a trabajar para nosotros, o mueres de hambre si así lo prefieres”. El capital es la imposición a nuestras vidas de una cierta forma de hacer, de una cierta forma de relacionarnos con los demás. El capital es la lucha por transformar nuestro hacer en trabajo, por un lado, y por hacer que trabajemos según las ordenes del capital una vez que nos tenga en el lugar del trabajo.

Y desde luego nos defendemos luchando, nos defendemos porque aun no somos maquina. Nos defendemos luchando al arrojar el despertador contra la pared, acostándonos tarde aunque sepamos que será en detrimento de nuestro rendimiento laboral al día siguiente. Nos defendemos luchando, cuando damos mas prioridad a jugar con nuestros hijos que a producir ganancia, cuando exigimos salarios mas altos o condiciones mas favorables, cuando nos manifestamos en contra de la miseria creada por la imposición de la propiedad privada., cuando soñamos con una sociedad mejor, una sociedad en la que nosotros mismos decidamos que es lo que vamos hacer.

Al fin y al cabo es el capital quien nos clasifica. Es el capital que nos dice todos los días “ No tienes propiedad, debes venir y trabajar para nosotros; luego te iras a casa sin propiedad y volverás el día siguiente, y así durante el resto de tu vida y así también tus hijos y los hijos de tus hijos”. Es el capital quien se asegura que en la fabrica no solo se reproduzcan mercancías, sino también dos clases””. Como dijo Marx… extractos de Jhon Holloway

Saludos cordiales,, RAS Siglo XXII

pedro2_jose@yahoo.com


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Pedro J Patiño H.

Químico, Investigador de Asuntos Económicos e Históricos, Analista Político, Eco socialista y Bolivariano.

 pedro2.patino@gmail.com      @pjph

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