El flamante video mostrado por Henry Ramos Allup, donde aparece el prófugo de la justicia venezolana Carlos Ortega, arengando a los adecos de rancia y nueva militancia a la recolección de firmas, para la relegitimación del “partido del pueblo” (así le decían a Rómulo Betancourt en su pueblo natal de Guatire) es una demostración evidente de que los adecos se quitaron las pantaletas, no sabemos a ciencia cierta si fue por que perdieron el pudor, o fue que quedaron como Dios los trajo al mundo, y ni tan siquiera se percataron de su estado de total desnudez.
La degeneración de este otrora partido político es verdaderamente patética; la AD de antaño contó con hombres de indiscutible valía, y eso hay que reconocerlo, bastase con recordar a hombres como Rómulo Gallegos, Andrés Eloy Blanco, Pinto Salinas, Carnevali, Leonardo Ruiz Pineda, Juan P Pérez Alfonso y otro tanto, en fin un partido con tal liderazgo, no podía ser menos que un partido revolucionario de aquella época, para que venga hoy en día el pseudo dirigente Henry Ramos Allup a mostrar esa pamplinada de video como si se tratara de un trofeo, absolutamente carente de contenido político y de principios éticos, pero preñado de banalidad como lo es la recolección de firmas para la legalización partidista, encabezando dichas firmas por el propio Carlos Ortega, y por Carlos Andrés Pérez, Jaime Lusinchi, Cecilia Matos y Blanca Ibáñez. Consideramos que la relegitimación de un partido político no es un asunto que se logra por un simple acto administrativo de recolección de firmas, sino mediante la transformación de sus tesis políticas y programáticas, y para ello se requiere de la participación protagónica de su militancia, cosa que la dirigencia Adeca le ha negado sistemáticamente a su propia base.
AD es el ejemplo típico de un partido que se fue desdibujando con el tiempo hasta perder su identidad ideológica y su doctrina y se fue transformando en una simple maquinaria electoral, dichas maquinarias por lo general se transforman en chatarras, cualquier parecido con URD, el MAS, y Bandera Roja no es pura coincidencias, ojo los amigos de PODEMOS, PPT Y EL PCV debemos aprender de las experiencias pasadas sí pretendemos tener una larga vida, el que no oye consejos no llega a viejo.
De igual manera consideramos que el PSUV o como se llame en definitiva deberá conformarse sobre bases diferentes al partidismo tradicional, mediante nuevos paradigmas estrcturales y funcionales, coordinado por un liderazgo surgido del propio pueblo, quienes a su vez tendrían que sistematizar un proyecto político, ideológico y programático surgido de la discusión y el debate, escenificado por el sujeto protagónico de la revolución venezolana que no es otro que el pueblo, empoderado y soberano.
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