La semana pasada, muy emocionado, Baltazar le envió merecidos elogios y agradecimientos a Yon Goicochea. “Esos muchachos están haciendo un trabajo admirable, excepcional. Tenemos que apoyarlos muy prudentemente, y no desgastarlos porque todavía nos quedan varias semanas por delante; el frente debería ser mucho más amplio; nos falta apoyo de todos los medios, un apoyo como el que tuvimos el 2002”, le comentó a Cabeza e` Motor.
Sus preocupaciones siguió confesándoselas a la gente de Resistencia Activa: “Ellos creen, los del gobierno, que eso se queda así. No señor, los ataques que ha lanzado el Gobierno contra la Conferencia Episcopal Venezolana por su posición sobre la reforma constitucional serán abordados durante una reunión entre obispos latinoamericanos y el papa Benedicto XVI.”
El asunto será la semana próxima. Baltazar sabe que estas denuncias las procesa un equipo de trabajo del Vaticano, experto en relaciones internacionales. El Vaticano no se mete en pelea que pueda perder. Pero Baltazar se siente viejo y quiere hacer un gesto memorable antes de que se los lleve la “Vieja Sebastiana”. Así, que la directiva del Consejo Episcopal Latinoamericano viajará al Vaticano para discutir diversos temas con el pontífice. Uno de éstos es el proyecto de reforma constitucional que impulsa el gobierno del presidente Hugo Chávez y las cada vez más pugnaz relación entre el oficialismo y los jerarcas de la Iglesia Católica.
Dijo el alto prelado: "No era uno de los temas en la agenda, pero decidimos incluirlo. Vamos a presentarle al santo padre un informe sobre el tema de la reforma. Esto incluye el texto de nuestra exhortación a los venezolanos, así como las reacciones que ese documento suscitó en la sociedad y en el Gobierno". Porras, quien es primer vicepresidente del Celam, añadió que llevará al Vaticano las declaraciones contra la Iglesia Católica por parte del presidente Hugo Chávez, el ministro Willian Lara, otros voceros del oficialismo y el padre Martín Zapata, rector de la Universidad Santa Rosa y sacerdote suspendido de sus funciones. La lista es larga e incluye unas 247 personas, con cédula y todo. Él ha dicho que en nada tiene que ver con una Anti Lista de Tascón, que podría llamarse Lista Porras y Porras. "El Papa, incluso antes de su investidura, cuando estaba a cargo de la Santa Congregación para la Doctrina de la Fe, ya tenía muy claro cuál es la situación en Venezuela", declaró.
El obispo deploró las descalificaciones que recientemente emitió el Ejecutivo contra él, porque solamente ha dicho que Chávez es dictador, que la Reforma es inmoral y este país merece que lo metan en la quinta paila del infierno. Nada más. "Nunca habíamos tenido en Venezuela un gobierno que se ufanara de esta manera de ser católico, pero sólo con la intención de poder denigrar de la Iglesia y hasta manipular a algunos de los miembros del clero. El Gobierno quiere hacer ver que nuestra Iglesia está dividida, pero eso no es cierto", expresó.
"El caso de Martín Zapata representa algo marginal, porque él realmente es marginal", dijo Porras sobre el rector de la Universidad Santa Rosa. "Él pudo haber tenido una postura personal a favor del Gobierno, pero a estas alturas queda claro que lo están manipulando. A él sólo le digo que el que le tira a su familia, se arruina, y lo malo es que que como está arruinado, no sé qué más podemos esperar de la maldición que se le viene encima.".
El prelado concluyó: "No diría que la situación entre el Gobierno y la Iglesia se ha deteriorado, porque para ello tendría que haber sido buena antes, y eso nunca fue así. Ha habido puentes reales entre el Gobierno y la Iglesia, principalmente el 12 de abril de 2002, cuando yo el cardenal Velasco fuimos a Miraflores a prestar decididamente nuestro apoyo al gobierno. Ahora, si el gobierno no pudo sostenerse, esa no fue nuestra culpa sino de la circunstancia jurisprudente como dicen los abogados. Las pocas muestras de diálogo han sido algo más mesiánico que otra cosa".
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