Le expresaba, porque su ignorancia es mucha: ¡Osana en el cielo! ¡Bendito el que viene! ¡Usted es Goliat! ¡Usted sí puede! Me lo quitaron todo…. HABILÍTAME OBAMA. Si usted quiere, usted puede.”
ESTE es al único negro que quiere y acata en este momento Leopoldo López. Su mamá siempre le ha enseñado que negro es negro y su apellido mierda. Primera vez en su vida que lo enloquece un negro. Y ha vuelto a Caracas diciendo que Osana (Obama) es un hombre de una gran estatura moral, educado en el silencio humilde de los pobres, dulce como una madre y más genial que Bolívar. “Yo, por ejemplo, no hubiera hecho lo que hizo José Martí, ir a la Plaza Bolívar y presentarse ante el Libertador. No, yo voy ante el hombre que va a ser el más poderoso de la tierra. Mil veces superior que todos los poderes públicos de Venezuela. Que será más grande que nuestra Iglesia católica que todo lo pretende resolver en el cielo después que uno esté muerto”: “mejor dicho, creo que a Osana (Obama) no se le debería llamar negro, sino “almost like black. Y ahora mi consigna será OBAMA SÍ SANA”.
En realidad –ha dicho él a Cabeza e’ Motor y a Antonio Ledezma, quienes le esperaban en el aeropuerto, con una pronunciación perfecta- “Don't be afraid of dark color!”
Leopoldo recuerda que como él, en el pasado, fue Violeta Chamorro, la nicaragüense la que dio el primer ejemplo, jala que jala en Washington, la forma más expedita en este continente para ser Presidente. “Nada de ir a luchar a los barrios, nada de recorrer las calles, las plazas y mercados: un abrazo a un candidato seguro en EE UU, te concede la gracia que ni Dios puede”, ha dicho eufórico como una rata.
Cómo le encantaría a Leopoldo ser mujer en este instante crítico de su existencia, en el que se está defendiendo como una gata parida. Qué no haría. Él siempre consideró que María Corina Machado fue demasiado idiota, que no le supo sacar provecho a su alma. Él sí está decidido a todo. Mírese la foto, convertido en todo un bichito miserable, mirando como quien mira al dios del billete; con qué locura y delicia al mismo tiempo mira y queda embobado contemplando a su Osana. OBAMA EN EL CIELO.