Anda realmente asustado Bobolongo, porque teme que esta vez la justicia se moverá y le dictarán auto de detención. Entonces llama a Madrid: “Me podrían matar, señores de El País; hagan algo, please”, a Miami: “No sé si salga vivo de esta, por favor que la SIP se prepare, sorry”, a París: “Mis vacaciones están en pico e` zamuro, no sé si pueda asistir a la cena con Marcel, SOS.”
Federico Alberto Ravell está confiado en que se cagará en el que se atreva a medio tocarlo y se lo ha dicho a Bobolongo: “No hombre, chico, ese Mario Isea no es sino otro bocón, pendejo como todo el resto de la Asamblea Nacional, que ladran PERO QUE NO PUEDEN MORDER por el bozal de arepa que los imposibilita para todo. Quédate tranquilo. Entre tanto no dejes de hacer algo con Pablo Medina y el viejito Consalvi”. Por eso entonces Bobolongo salió en volandas, con su movimiento 2D, para anunciar la creación de un parlamento para debatir asuntos de relevancia de la actualidad nacional y, especialmente, sobre el tema de las 26 Leyes Habilitantes.
No obstante Bobolongo se preocupa y le dice que esta vez va a ser diferente: “Nos han cogido Federico, nos han cogido con la mano en la maleta. El maletín, tú sabes, no es de ellos, es nuestro.”
Ravell es todo serenidad, todo cordura, con un autocontrol total de los nervios: “Tú viste que he sido mencionado en una nueva grabación, difundida el pasado jueves, en la cual se escuchan las voces de militares que afirman que Globovisión, es un canal amigo a diferencia de los canales del Estado, a los que amenazan con bombardear. ¿Tú crees que eso a mí me hace coquito? Mira, si no pudieron con nosotros el 2002 ni con la voladura del carro de Anderson, tú crees que con esas ridículas escuchas nos pueden levantar un expediente serio? Pendejadas, chico. Que se atrevan para que tú veas cómo en dos días les tumbamos de verdad el gobiernito ese.”
“¿Te acuerdas en aquella ocasión en que el Ministerio Público me citó sobre un presunto soborno a la juez 34 de control de Caracas, Alejandra Ribas, para favorecer a Nelson Mezerhane, y le caímos con todo el frente pesado de nuestras mariscalas y mariscales más aguerridos y los volvimos trizas?: Aymara Lorenzo, José Vicente Antonetti, Roberto Giusti, Julio César Pineda, Rebecca Moreno y Andreína Gandica, Pedro Luis Flores, Kico Bautista, Carla Angola, Roland Carreño…
“Así, Miguel Henríque que queda Ravell para rato; yo no me quemo como la chamiza, soy duro, duro, duro de matar. Federico y Leopoldo Castillo para rato, y el que no quiera vernos, pues que use el control. Nadie los está obligando a vernos. A fin de cuentas, ¿no es en eso donde radica el verdadero libre albedrío? Yo, por ejemplo, jamás pierdo mi tiempo oyendo las monsergas del teniente coronelito. Si te dan, responde más duro. No te amilanes, que tú eres de los fuertes y de los necesarios”.
“¿Qué cometemos algunos errorcitos, y quién no?, ¿Qué se nos ha ido la mano armando unos videitos para defender a nuestros amigos como Mezherane, y a quién no? ¿Qué nos equivocamos con Mingo que de marihuanero se pasó a darse de las greñas como una verdulera con nuestro Leopoldo Castillo, y qué? ¿Qué pusimos a Freddy Bernal al lado de Gouveia en lo de la Plaza de Altamira en aquella matazón mal planificada? ¿Qué si armamos el golpe por una sobredosis de cocaína que se le metió el personal aquellos días, y quien no se da sus pases en estos tiempos? ¿Qué apoyamos el paro petrolero por un jugoso contrato con Movilnet y Telcel? ¿Qué dirigimos las guarimbas, las marchas y contramarchas, y la traída de los paramilitares, junto con los atentados en los cuerpos diplomáticos y el asesinato de Danilo Anderson? ¿Y qué, carajo? ¡No nos joroben, por favor!”
“¿Porque hayamos cometido, como Radio Caracas, y durante estos últimos 9 años solamente unos treinta planes para salir del tenientito, nos van a venir que nos tirarán un cierre total? Sin duda que las cosas buenas que hemos hecho en pantalla superan con creces lo malo. Yo siendo el tenientito me siento en una mesa a dialogar con la oposición, como lo que está pasando en Bolivia. Coño, es que no aprenden. ¿Bueno vale, qué es lo que tú quieres, Miguel Henríque, seguir estrujándome con el Bicho y con la Bicha esa?, y que cambiemos nuestros programas por uno hortera que modere, por ejemplo, Napoleón Bravo que ya de bravo no le queda un carajo. Que se traigamos a Orlando Urdaneta y a Patricia Tolete Poleo para que monten un espacio que se llame la Ruleta Rusa, ¡MATE USTED AL COMANDANTE CADA MAÑANA! ¿Qué te parece? No. No te rías… Yo no sé por qué se ahogan en un vaso de vinagre, vale. Yo, insisto, prefiero quedarme sin concesión y poder afeitar cañones todos los días y no poderme ver al espejo con toda la risa que me escuece, porque, mira, aquí lo que sobra es sangre para defender lo nuestro. Sangre con whisky fino. Además, yo consulto a todo el mundo para la línea editorial que sigo y mantengo. A todo el mundo, y eso le consta a la propia santa iglesia que nunca nos abandona, y de eso sobran pruebas. ¿Isea, entendiste?”.
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