La
derecha venezolana, es decir, el rancio y anticuado oposicionismo,
viejos políticos de la IV República y sus imberbes mamparas
(estudiantes sifrinos hijitos ricos de papita y mamita, hasta que los
abandonen tristes y desamparados en el medio del estiércol) insisten en
confundir Capitalismo con Democracia cuando piden libertad durante sus
marchas, durante sus ridículas y vergonzosas protestas nalgas al aire
y hasta en sus fingidas
huelgas de hambre, pretendiendo igualar al sistema económico
capitalista con el sistema político democrático. Lo que pide realmente
el oposicionismo es mas injusticia, mas privilegios para las clases
pudientes, en
nombre de la “democracia burguesa”.
En realidad lo que ellos pretenden es defender a capa y espada al
capitalismo, el cual en su esencia es siempre salvaje, a los intereses
de las grandes corporaciones y a las minorías exageradamente
privilegiadas de la burguesía venezolana.
La Revolución Bolivariana y Socialista venezolana, a través de su líder
fundamental, el Comandante Presidente Hugo Chávez ha sostenido
reiteradamente
que el socialismo es el único sistema social y económico mediante el
cual es posible lograr la igualdad, la cooperación y el despliegue
total de una verdadera Democracia, mientras que el Capitalismo es la
negación de estos ideales.
La Democracia y el Capitalismo son incompatibles porque este último es
una manera no democrática de organizar la economía. El Capitalismo no
organiza la producción y la distribución de la riqueza sobre la base de
los derechos del pueblo sino sobre la base de la acumulación de la
riqueza, la cual una gran proporción es poseída por unos pocos quienes
se apoderan del poder político. Los pobres difícilmente pueden mejorar
sus condiciones de vida mientras los ricos se hagan mas ricos. El
Capitalismo siempre tenderá a incrementar las diferencias sociales, las
cuales no han podido ser superadas a pesar de la intervención del
Estado, que es el instrumento mediante el cual la "Democracia Burguesa"
ha intentado cumplir las promesas de justicia social.
Sin embargo, el
capitalismo continua en el mundo actual ganándole la partida al
socialismo, porque la oferta del capitalismo se sostiene gracias a las
debilidades humanas, es decir, el instinto que sostiene al capitalismo
prevalece sobre la razón que ofrece el socialismo.
Pero hay una esperanza para que el socialismo le gane la partida al
capitalismo. Esa esperanza es el Amor. La fuerza del Amor es la fuerza
de los débiles, es la fuerza que necesita el socialismo para cumplir
sus proyectos y sus promesas, es en el Amor donde puede aplicarse
plenamente la justicia.
Las tradiciones religiosas, y particularmente la cristiana, explica la
potencia que implica sentirse amados como hermanos. El Socialismo apela
a la verdadera Democracia, a la libertad y a la igualdad mientras que
el Amor, políticamente comprendido, apela a la fraternidad, por lo que
no se puede construir la Democracia sino es sobre la base del Amor a
los demás. Es así como será posible encontrar el camino adecuado para
que la Democracia, y de esa manera el socialismo finalmente pueda
vencer al Capitalismo, un camino que nos permita organizar la economía
de una manera democrática, es decir, crear estructuras políticas y
económicas que sirvan para redistribuir la riqueza con justicia,
garantizar los derechos sociales y controlar las fuerzas productivas
para ponerlas al servicio del bien común, un Socialismo en el que la
igualdad se construye desde la libertad. Por esto, el destino natural
de la Democracia debe ser el Socialismo, el cual no tiene nada que ver
con el sistema capitalista, donde la acumulación de la riqueza seguirá
siendo el instrumento que soporta a la ley del más fuerte.
Las medidas políticas, económicas, sociales, educativas, tecnológicas y
culturales de Hugo Chávez han sido dirigidas a la construcción del
Socialismo del Siglo XXI, mediante una propuesta basada en el Amor al
prójimo y en la plena aplicación del cristianismo original, el que
pregonaban los primeros cristianos a través de sus apóstoles.
Urge entonces la unión natural de los verdaderos cristianos, creyentes,
laicos, ministros y sacerdotes de las iglesias cristianas, los que
verdaderamente creemos en las enseñanzas de nuestro señor Jesucristo,
con la Revolución Bolivariana, ¡no hay tiempo que perder!
PATRIA, SOCIALISMO O la alternativa que ofrece el capitalismo, la
MUERTE del Planeta................ …..VENCEREMOS.
marcanoomarj@gmail.com