Despejemos la incógnita. Debemos dejar constancia previa de que lo que aquí vamos a expresar no son nuestros deseos, ni es política – ficción. Es el resultado lamentable de un avance de lo que humildemente podemos llamar un análisis de la coyuntura política regional en caliente, totalmente alejada de los intereses de grupo, a años luz de las opiniones de algunos “expertos” que logran sobrevivir la crisis y mantener su status, vendiendo su pluma y su voz a los factores políticos en pugna por el poder; contribuyendo a la anarquía, a la confusión y la manipulación de nuestro pueblo.
Hemos dicho que estamos en presencia de una pugna feroz, entre dos tendencias con grandes coincidencias y similitudes en la defensa del capitalismo neoliberal. La practica conocida de estas dos tendencias tanto en el gobierno, como en la oposición permiten que el pueblo los identifique rápidamente como una misma miasma. Nos referimos, primero, a la tendencia hegemónica militarista del PSUV y sus aliados incondicionales; acaudillados por el General de División Francisco Rangel Gómez; quien ya lleva ocho años en el poder, conduciendo a Guayana hacia el caos y hacia la derrota electoral del proceso bolivariano; pasando por un elevado enriquecimiento de la burguesía financiera y las mafias que controlan todo el intercambio de bienes en la región, especulando con los productos de primera necesidad, igual o peor que durante la cuarta republica, bajando la alcabala para producir la inseguridad social, la corrupción y atemorizando a la población para que acepte en silencio esa hegemonía; que limita los derechos soberanos del pueblo. ¿Acaso no se debe a esta conducta reformista, las derrotas en los sindicatos más importantes y las derrotas electorales en los municipios Heres y Caroni; parcialmente; pero con características avasallantes en los municipios Piar, El Callao y Roscio?.
La otra tendencia que compite con la primera, en nivel de rechazo de parte de la población, que es la identificada con la MUD, acompañada de los partidos tradicionales AD, copey, MAS, Causa R, Bandera Roja y la excrecencia representada por Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo, etc, etc…la mayor representación de la derecha internacional, actuante en Venezuela. Acaudillada por el desclasado indígena Andrés Velásquez, ex obrero de SIDOR, y ex gobernador del estado Bolívar; por obra y gracia de su funesta alianza con el zar Sucre Figarella, en los tiempos de la destrucción del otrora gran partido AD; sempiterno grupo dominante en estas tierras. Este grotesco personaje, que sin ningún tipo de vergüenza aspira nuevamente al gobierno regional, como consecuencia de las vacilaciones y la conciliación de clases del PSUV, es nada más y nada menos uno de los representantes de la privatización de SIDOR y del despido de 8.000 trabajadores; pero también es responsable del golpe petrolero que le produjo perdidas a la nación por más de 20.000 millones de dólares y también responsable de la tragedia económica y social que obligo al pueblo venezolano a cocinar con la madera de sus muebles por la falta de combustible y gas.
Vista la situación, nada bueno se espera para Guayana en los próximos años. Porque si te pela el chingo, te agarra el sin nariz. O lo que es lo mismo no es justo pensar, que votar por el original, que por la caricatura. Con su conciencia determinaras el rumbo a seguir y así evitar el laberinto que se avecina. Cada quien que asuma su responsabilidad y recoja sus vidrios. El que mata su culebra, coge un palito y la bota
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