Si bien la victoria lograda en 20 estados de Venezuela por los candidatos de la Revolución Bolivariana en las pasadas elecciones del domingo 16 de diciembre, son una victoria chavista; cada una de ellas, expresa un sentimiento legítimo del pueblo, como lo manifestó el pueblo del Táchira por José Gregorio Vielma Mora al brindarle un rotundo respaldo.
Remontar la cuesta - como lo expresábamos en anteriores artículos - para alcanzar el triunfo en esta región fronteriza, no era cosa fácil, ni sólo un reto; sino una tarea titánica para un líder tan joven como el Capitán Vielma Mora, quien nacido en las filas del Movimiento MBR 200, al lado del Comandante Hugo Chávez Frías, asumió el compromiso y conquistó la meta.
La adversidad y el rechazó demostrado por el Táchira en las elecciones del 7 de octubre, quedaron atrás y dejaron muy claro el acento regional, como una clarinada para demostrar que los intereses regionales están por encima de los nacionales; sin que con ello, no se sienta el verdadero sentir de nuestra Patria: Venezuela.
Vale la pena recordar las razones que exponíamos, como punto de honor para evitar en la frontera una “media luna” y dejar pasar la oportunidad histórica, por razones estratégicas y geopolíticas, de convertir al Táchira en la puerta de nuestro país al MercoSur.
Pues bien, el pueblo tachirense demostró que tiene claridad histórica y sentido de pertenencia para entender su rol hacia el futuro y más, para apoyar a un líder a quien debemos ayudar todos para consolidar sus objetivos, expresados en su programa de gobierno y en los lineamientos trazados en el Plan Simón Bolívar 2013-2019.
No es fácil asumir las riendas de un estado gobernado para un grupito y para intereses contrarios al sentimiento nacional en revolución. Entendemos la plataforma que recibe Vielma Mora utilizada para abrir las puertas al capitalismo y no al espíritu bolivariano que encarna el Presidente Chávez.
No obstante, también somos conscientes del espíritu regional que se manifiesta en nuestro estado, con intereses aparentemente encontrados; pero que al final buscan el espíritu unitario y al de un líder con experiencia gerencial, quien sabrá sortear las pruebas para equilibrar su gobierno.
Una pesada carga burocrática y clientelista se encontrará Vielma Mora en la gobernación y parte de ella, con pesados vicios y signos de corrupción. No todo lo que brilla es oro y además, no es igual manejar una organización de impuestos a una gobernación; pero ese es el reto del nuevo gobernador.
Deseamos éxito e imploramos al Santo Cristo de La Grita para que ilumine a Vielma Mora por los caminos de la auténtica Revolución. Habrá muchos profetas del desastre, al igual que muchos eruditos y oportunistas quienes tratarán de calentarle las orejas, ensalzarlo y revestirlo de una aureola presidencial.
La humildad, la prudencia y la lealtad al Comandante Hugo Rafael Chávez Frías deben estar siempre presentes en el nuevo gobernador. Todo a su tiempo y en su justo lugar, para hacer realidad los sueños del pueblo tachirenses quien los ha depositado en su líder y los ha puesto en las manos de un hijo de la Revolución Bolivariana…
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¡Viviremos y Venceremos, Por Siempre!
