“Me perdonan, pero el Inca Valero no representa a la escuela venezolana de boxeo”
Escrito por Jesús Borges.
Podría escribir en pocas líneas que “ninguno de los boxeadores que usted nombró tenía la pegada del Inca Valero, Son 27 combates ganados en forma consecutiva, señor Jesús Borges. Cuando usted escribe del oriental Cruz Marcano parece olvidar que este boxeador era un torpe. Lo de él era masacrar al contrario sin importarle recibir, ¿qué es lo que hace el Inca que llama tanto la atención?
No es para nadie un invento del agua tibia admitir que cuando un par de boxeadores estilistas se enfrentan aquello es bastante fastidioso. Una vez fui al recordado Palacio de los Deportes en la avenida San Martín en aquellos programas que montaba la Gondel-González- Delio o lo que es lo mismo el narrador Delio Amado León y el comentarista Carlos González dueños de esa empresa boxística, ¿sabe quiénes se enfrentaban? Nada más y nada menos que Antonio Gómez. “el. Rey de la cintura” y Kid Pambelé el astro de los estacazos. Ya en el cuarto round el público lanzaba las esterillas al ring. El careo era más pavoso que en un escrito de JULIO BORGES.
El Inca Valero ha tenido éxito con su forma de combatir. Puro esquive no le gusta al público. Si viajamos al boxeo internacional recordamos el combate entre Sugar Ray Leonard y Mano ´e Piedra Durán. Durán parecía un loquito buscando a Sugar para darle su tate quieto, pero el insigne negrito se burlaba de él y hasta le lanzaba aquello que se llama “boloponch”. El público quería dinamita hasta que Sugar Ray se la dio y se enfrascó en un toma y dame con Mano de Piedra. Los aplausos no dejaban escuchar la furia de los combatientes.
Al Inca Valero no le va a suceder los que a Gatica. El tiempo se ha mecido en las sogas de los años. Si Gatica era peronista y se sentía bien con eso, que importa que la derecha oligarca lo llevara a la muerte: se vive y se muere con lo que queremos ser. El Inca Valero no sufrirá jamás de eso porque además de ser chavista se ha ganado el fervor y el amor de un pueblo que lo ha sentido en toda su capacidad humana, irreverente, sin temor a lo que digan, incluso los grandes promotores de Estados Unidos. En su pecho lleva la imagen del comandante Hugo Chávez Frías. El Inca Valero quizás no sea un Sonny León ni un Antonio Gómez del estilo, de la belleza corporal en el ring, pero el Inca Valero lucha con lo que le dio la naturaleza para llevar el pan a su casa y para vivir en toda la intensidad de un joven deportista.
¿Cuál es esa escuela la que usted se refiere? En todos los boxeadores que nombró hubo un estilo distinto para caminar el ring. Oronó del cual también alega que no fue gran cosa, fue campeón mundial en su tiempo. Además que en el boxeo amateur le dio muchas medallas al boxeo venezolano. Nunca olvidaré aquel título cuando Oronó se hizo con la medalla dorada en el exterior. Un diario tituló OROSÍ.
Respeto su forma de llevar el artículo que a bien escribió en Aporrea. Empero no estoy de acuerdo en querer minimizar a un boxeador que lleva 27 combates al hilo y que tiene lo que debe tener un campeón de la humildad para llevar la caraota a su familia: ¡pundonor, salud, fortaleza y gran amor por su patria! ¿Cuáles de los que nombró pudo haberse colocado un tatuaje del presidente del país en su pecho?
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