Acuso públicamente y por este medio al gobernador del Estado Mérida, Alexis Ramírez de estarle sustrayendo a la ciudad de Mérida, todo el patrimonio que heredamos de la gestión del anterior Alcalde de la ciudad, Lester Rodríguez y de la que continuó el actual Alcalde, Carlos García.
Esos dos valerosos ciudadanos, orgullo de nuestra ciudad, habían logrado, después de mucho trabajo, hacer de Mérida la ciudad más sucia de Venezuela. Título que exhibíamos con orgullo ante los miles de turistas que nos visitaban. Montañas de basura fétidas adornaban nuestras calles; gracias a ellas logramos construir las mejores barricadas del occidente del país, sólo superadas por las de San Cristóbal.
Cientos de bellos zamuros volaban por nuestros cielos en procura de su diaria ración y hermosas y robustas ratas compartían con ellos los alimentos descompuestos que los ciudadanos donábamos para su sustento. Unos 40 indigentes trabajaban en las madrugadas y se encargaban de romper las bolsas plásticas y regarlas en las aceras y calles de la ciudad. Era un espectáculo que todos disfrutábamos y felices saltábamos cuando íbamos a trabajar por encima de las bolsas rotas. Eso formaba parte de los ejercicios aeróbicos que diariamente hacíamos merideños y turistas.
Los citadinos que usábamos colonias y perfumes dejamos de usarlos y así nos ahorramos una platica, pues el olor de la basura era tan fuerte y penetrante que ningún perfume lograba contrarrestarlo. Además hermosas y gordas moscas comenzaron a llegar a nuestras mesas cuando comíamos y de noche nos deleitábamos con grandes zancudos que tocaban bellas melodías en nuestros oídos.
Vivíamos felices, podíamos exhibir a todo el mundo muestra de nuestro desarrollo, pues, según una tesis de la economía capitalista explica que: “el desarrollo de los pueblos se mide por el volumen de basura que produce, pues eso significa que está consumiendo grandes volúmenes de mercancías”.
De pronto todo ese esfuerzo que había hecho Lester Rodríguez y continuaba Carlos García, se vino abajo por la acción rapaz del gobernador Alexis Ramírez, quien sustrajo de las calles merideñas nuestra amada basura y ahora ya no tenemos nada de qué enorgullecernos. ¿Qué le decimos a los posibles turistas para que vengan a visitarnos? ¿Qué le vamos a mostrar con orgullo?. ¿A dónde lo vamos a llevar a observar el vuelo majestuoso de los zamuros de cabeza blanca?. Para más colmo el gobernador está empeñado en limpiar la Plaza Bolívar de la ciudad. Esto es inaguantable. Como ciudadano que ama a esta ciudad y en la cual tengo ya treinta años viviendo, llamo a los merideños de verdad, a que nos concentremos frente al palacio de gobierno y hagamos una protesta pacífica, previa solicitud de permiso ante la alcaldía, para darle un parao a este gobernador que está acabando con el patrimonio que a esta ciudad dejó la alcaldía y que impunemente el gobernador sustrae. Si no obtenemos una respuesta inmediata nombremos una comisión para que vaya a Caracas a entrevistarse ante el Presidente Nicolás Maduro y además hacer la denuncia ante la Fiscalía, para que designe un fiscal del Ministerio Público que le pongan los ganchos a ese gobernador que le está robando a Mérida su más preciado tesoro. He dicho y las mentadas de madres me las envían a mi correo.
