Vi al presidente Nicolás Maduro aceitando la maquinaria del Psuv con una jornada de interacción y orientación con la Red de Articulación y Acción Sociopolítica (RAASS), en función de las elecciones a diputados de la Asamblea Nacional, con la participaron de jefes y jefas de Unidades de Batalla Bolívar Chávez (UBCH), jefas y jefes de calle de algunos estados del país, en la que dijo que no podían fallarle al pueblo, y le pidió a Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, un informe sobre el trabajo que, al respecto, se hace en las comunidades.
Ante tan contundente decisión me pareció un buen momento para plantearle al máximo líder de la revolución bolivariana y al constituyente Cabello, que lamentablemente, en Zulia, si se le falla a las comunidades, un ejemplo, es el extravío de perniles y de juguetes que, por dos años consecutivos en diciembre, afecta a los vecinos adscritos al Consejo Comunal Raíces del Poder Bolivariano 1 y 2 del barrio Los Robles, parroquia Luis Hurtado Higuera, del municipio Maracaibo, por citar un caso, porque tomando en cuenta las denuncias de las redes sociales, la irregularidad con las patas de cochino se registraría en varias comunidades del país.
Este Consejo Comunal entregó, en 2018 y 2019, tan solo dos Clap por año aun cuando el presidente Maduro, el gobernador Omar Prieto y el alcalde Willy Casanova, hablan de una regular distribución mensual y no es así, de allí considero que esta situación al igual que el extravío de los perniles y los juguetes requieren de una seria investigación.
Dijo Maduro refiriéndose al Psuv: "Hay que trascender de una poderosa maquinaria electoral únicamente a un poderoso movimiento sociocultural y político, que atienda al pueblo en todas sus necesidades…" Enhorabuena, porque la verdad es que en Zulia los políticos de esta organización parecieran de adorno. Ya lo expresé en un anterior artículo y lo repito: de este buró en la región solo se sabe, cuando hay elecciones o llega de visita algún alto representante de Caracas.
De lo contrario, en Maracaibo, al pueblo se lo puede tragar la miseria, la impotencia, la indolencia, la injusticia, como la que se registra con la distribución de juguetes y perniles navideños del Consejo Comunal Raíces del Poder Bolivariano 1 y 2 del barrio Los Robles y, sin embargo, ningún político se pronuncia al respecto; la gente se siente sola, abandonada, a la deriva, sin gobierno, con las consecuencias de que la culpa se la echan al presidente Maduro.
Lo más lejos que han llegado los vecinos de Los Robles sin apoyo de ningún tipo, ha sido hasta la parroquial política, la señora Sonia Díaz, quien alega aún con lo grave que resulta quitarle el alimento de la boca a familias que quizás no tengan ni para comer, aparte de que podríamos estar en presencia de un millonario robo a la nación, que la situación se trata de un error que solo amerita sanciones, cuando los afectados piden como mínimo una rigurosa investigación policial y la destitución de los representantes del consejo comunal.
Dijo Maduro: "Tenemos que afinar la calidad y velocidad de respuesta, la calidad del tratamiento que necesita el pueblo y la velocidad con que llega la atención con todos los equipos de las grandes misiones (…) tenemos que ponernos a la altura de las necesidades del pueblo".
Como debe ser, y esto se lo apoya la gente, porque así es la revolución, esa era la dirección del comandante Chávez, desgraciadamente, muchos de los funcionarios rojos rojitos que deben hacerles honor a estas palabras, no cumplen la orden y le dan la espalda al pueblo.
Esperemos que, en el caso del Zulia, el robo de perniles y de juguetes no caiga en letra muerta, y el constituyente Diosdado Cabello ordene una debida investigación, lo que no han hecho muchos políticos zulianos que estamos seguros veremos ahora en la candidatura al parlamento nacional prometiendo villas y castillos…
Y se pueden llevar sorpresas, porque la gente en Venezuela está cansada de infiltrados y de esos políticos que no se sacan de la boca a Chávez, cuando en el fondo detestan a los pobres y odian a la revolución y al pueblo.