En Anzoátegui, ya las situaciones y los escenarios no nos causan sorpresas. Uno no sabe si es por la Faja o por sus bellezas turísticas, razón del porque los jerarcas del chavismo en Caracas se empeñan en hacer de nuestra entidad una especie de finca personal en donde solo piensan en manejar sus intereses.

La salida de Aristóbulo como protector del estado, tiene muchas explicaciones. La primera de ellas, es que no le atendía a esa responsabilidad, andaba en otras cosas. Después de eso últimamente había llegado a un acuerdo con Diosdado para hacer un frente oriental.

Las alarmas se encendieron en Miraflores y Maduro comisionó a Jorge Rodríguez para que manejara la situación. La primera medida fue nombrar a Luis José Marcano, Protector de la entidad federal, la cuestión no quedó allí, la inexperiencia de Marcano y su fatal paso por la alcaldía de Barcelona le restaba puntos para tan alta responsabilidad.

La solución que avizoró Jorge Rodríguez, tenía una sola salida, nombrar a David De Lima protector del protector. Y así fue que tras bambalinas, sin juramentarlo ni nombramiento, ejecutivamente le dan todos los poderes en calidad de protector del protector. Premio por su lealtad al chavismo, y como ya está en su última etapa, es algo así como una jubilación adelantada con suficiente fuerza como para disfrutar sus años dorados.

Con esa intención en su momento también fue que nombraron al profesor Istúriz, y el hombre se creyó líder, confinándolo posteriormente Maduro, al ministerio de Educación. David está en donde siempre quiso estar, manda más que él gobernador a la calladita. Poca gente sabe esto, por tanto no tiene que estarle resolviendo problemas a nadie, se hace el loco, siempre con el teatro de la mentira

Cuida a Luis José, en ese proceso de convertirlo en candidato a gobernador. Limpia el camino, busca alianzas en los municipios. Difícil tarea porque muy poca gente le crea. Apenas en Guanta y Puerto La Cruz, la nueva generación de los hermanos Gil, lo respaldan a través de Primero Venezuela. Estos señores no tienen nada que ver con el legado dejado por Víctor, Alexis y Pedro Gil.

El precandidato a alcalde en Puerto la Cruz, Rodolfo Gil, es la peor decepción de la familia, en un lapso menor de seis meses ha estado representando al Movimiento Ecológico, Pro ciudadanos, al papa oriental, y ahora con José Brito. Impresionante la mentalidad cambiante del Benjamín de los Gil.

Ahora bien, este apoyo no tiene ninguna significación a nivel de votos, esos ni van a ganar, ni van a dividir a la oposición, si es que logran unirse. El presidente Maduro tendrá que convencerse que ya De Lima vivió sus mejores días de estratega. Su gran proyecto de compras de diputados, ya caducó ¿a quien va a comprar? otra vez a Parra, o a Brito. Con esa mayoría no necesitan más votos en la Asamblea Nacional. David tendrá un gran problema con el enfrentamiento de Aristóbulo y Luis José Marcano. Aunque él es un artista, allí se le trancan las puertas no va a resolver nada ofreciendo dólares.

Y qué va hacer con Guillermo Martínez el exalcalde de Barcelona, protegido de Aristóbulo, él es su amigo. Jorge Rodríguez y Maduro están súper equivocados con David De Lima, su lealtad es circunstancial. Cuando fue nombrado candidato a gobernador de Anzoátegui, fue gracias al enfrentamientos de los cuatro precandidatos del chavismo, pelea que él atizó, para que se produjera un candidato distinto al del Psuv, y saliera dentro de las filas de los que hoy llaman El Polo Patriótico, tocándole al MAS en la persona de David, la candidatura a gobernador.

Miren, nada de extraño tendría que conociendo la capacidad operativa de ensañamiento de este actor de la política, que un día ponga a pelear nuevamente a todos los aspirantes chavistas, para él aparecer como el hombre de consenso y ajeno a esas peleas. Lo estoy escribiendo hoy, 19 de marzo del 2021, día de San José. Chávez, si vivió su traición en toda su dimensión en su propia cara, en cadena nacional, allá en Miraflores.