Los signos para descubrir un alacrán infiltrado se ven lejísimo. Tener entrada libre a Globovisión es uno, allí no entrevistan a un representante de Capriles o algún personaje ligado a Henry Ramos Allup, y de suceder por alguna equivocación lo harían una vez por la cuaresma. Lo que si notaran es que los alacranes pasan de entrevistados a entrevistadores, debido a la gran complacencia de los periodistas. Tal como sucede con José Brito. El alcalde de Lechería Manuel Ferreira es invitado permanente de ese canal.
Otra característica de esos alacranes, son los constantes viajes al exterior. Una periodista residenciada en el exterior de apellido Petit, publicó fotos de Ferreira, llegando a terminal de pasajeros en Miami, ¿A qué viaja tanto para esa ciudad? Tendrá negocios, de compras, disfrutar la vida, Todo eso cuesta mucho dinero. Algunos alacranes tienen parte de la familia en el exterior, sintiéndose con la necesidad de darle vueltas para atenderlos.
Difícil por parte de un alacrán declaran contra del gobierno chavista, en el contexto de cuestiones puntuales, generalizan a veces para disimular y seguir aparentando su falsa postura de opositor. Lo peor es que al ser descubiertos toman las supuestas banderas de justicia para castigar a los "traidores a la patria", escondiéndose ellos en el cuento del ladrón que gritaba con la mercancía robada en la mano "allá va el ladrón"
Igualmente los dirigentes del chavismo son incapaces de criticar a un alacrán, infiltrado o no, los dibujan como héroes. Quieren tenerlos de ejemplo para que otros caigan en la trampa de brincar la talanquera para hacerse millonario, mentiras, si más de un chavista anda en el centro de la ciudad pidiendo le brinden un café. Esos alacranes tienen un tiempo de vida útil, saben que al convertirse en esa especie animal sus días están contados, llevan el veneno adentro que les causara la muerte política en cualquier momento.
Los alacranes infiltrados se especializan en llevarle la contraria a la verdadera oposición, si esta dice que van a abstenerse, ellos son los primeros en luchar por la participación sin importarles que los expulsen de su partido y buscar tarjetas debajo de las piedras. Así sucedió en Lechería, Ferreira bajo la asesoría de David De Lima, consiguió el apoyo del Copei chavista, que tampoco fue de gratis.
El contacto con los directivos nacionales que tienen secuestrada esa organización, Miguel Salazar y Juan Carlos Alvarado llegaron a acuerdos con el actual alcalde, siendo esa tarjeta por el arraigo tradicional en la sociedad morreña la que le diera la victoria. Todavía Ferreira paga ese pacto con prebendas a favor de esos falsos copeyanos, pero que desafortunadamente tienen el control de la tarjeta.