Son muchas las lecturas sobre el resultado del referéndum consultivo de la reforma constitucional propuesta por el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, que salio favorable a la derecha y en consecuencia el NO obtuvo mas votos que el SI.
Me hizo recordar la campaña de las elecciones de 1973, en la que el candidato José Vicente Rangel representó a la izquierda venezolana.
En ese entonces, se utilizó un terrorismo publicitario diciendo que en el socialismo las ciudades eran oscuras y que los niños serían arrebatados de sus padres, que eso habían hecho los revolucionarios cubanos dirigidos por Fidel.
Era un argumento ideado por la CIA norteamericana, para desacreditar y debilitar al gobierno salido de la revolución que triunfó en 1959 en la isla isla cubana.
Esta estrategia, luego de más de treinta y cuatro años vuelve a aplicarse en Venezuela con la finalidad de aterrorizar a los venezolanos y evitar la reforma constitucional. la campaña surtió efecto en algunos sectores de la población, pero con más fuerza en la llamada clase media que hoy se recupera nuevamente, gracias a las medidas económicas y sociales de Chávez.
Me pregunto ¿por qué no fue lo contrario si se están beneficiando? Quiere decir entonces que la nueva clase media no tiene valores ideológicos diferentes a la de anteriores gobiernos, simplemente creen en el sistema capitalista e ignoran el significado de socialismo.
Sin embargo, el hecho notorio de una votación de mas de cuatro millones a favor del SI, significa un salto cuantitativo y cualitativo que fortalece la idea de construir la sociedad igualitaria, justa y de bienestar para todos.
Ahora bien, una vez que el CNE, emite el primer boletín, el mismo comandante Chávez acepta en cadena nacional los resultados para sorpresa de los dirigentes opositores, que ya tenían preparada la celada para incendiar el país, crear el caos general y propiciar una guerra civil que permitiera la intervención de fuerzas militares internacionales con Estados Unidos a la cabeza.
Se les cayó el plan y sus caras se enredaron de molestia y rabia. La oposición no obtuvo una cantidad de votos diferentes a los que logró en las elecciones de diciembre de 2006.
La verdad es que se estancaron y su techo hace tiempo está en esa cifra invariable.
Se conoce del resultado de esa fecha, donde la votación estuvo en mas de 7 millones votos a favor del presidente Chávez.
Pero que esta vez se abstuvieron 3 millones de electores produciéndose la realidad electoral que está en discusión.
Llama la atención, que ahora, nuevamente salga la alta jefatura de la iglesia católica pidiendo la disolución de la asamblea y el reintegro de los golpistas de PDVSA a la empresa petrolera pero diciendo que quieren reconciliación ¡qué cínicos!
Parecen unos politiqueros sin ética, que tomaron los templos para su actividad proselitista, como abusan de la libertad, no están con dios, están en contra de su propio pueblo porque apoyan a sus verdugos.
El planteamiento de impulsar la reforma bajo otra estrategia debe ser el objetivo fundamental en este año que viene, la idea debe concebirse en el contexto de la lucha ideológica que conduzca a entender el espíritu y naturaleza de los artículos mas atacados por la oposición referidos a la propiedad privada y social, la reelección presidencial, el estado de excepción y la geometría del poder.
Atacaron de la manera vil y mentirosa la propuesta constitucional argumentando la expropiación de las casas, empresas e hijos y eso produjo el mismo terror utilizado desde hace décadas para frenar el avance de las fuerzas del cambio.
La lucha se redimensiona y este pueblo ahora es más chavista.
La derecha utilizará ahora todas las vías para hacer de este referéndum un instrumento para pedir la renuncia del presidente, una constituyente o elecciones adelantadas.
No les queda otra vía, ellos saben que con Chávez manda el pueblo.
Olando Balbás (obalbasvester@gmail.com)