El
Sistema Neoliberal de Propiedad Intelectual se fortaleció en la
Argentina y en Latinoamérica en la década del 90, respondiendo a
intereses transnacionales tutelados principalmente por la Organización
Mundial de la Propiedad Intelectual conjuntamente con la OMC. Se desarrollaron
entonces, diversos mecanismos para asegurar eficacia en el
funcionamiento de dicho sistema, que básicamente presenta, entre otras,
las siguientes características:
- Una
Legislación mundialmente uniforme que asegure la aplicación efectiva
del sistema de Propiedad Intelectual a la medida de los conglomerados
transnacionales.
- La designación y cooptación de las capas directivas de los organismos encargados de la aplicación de las Leyes.
- La producción de los conocimientos asociados con la doctrina
neoliberal en materia de Propiedad Intelectual, y su posterior
transmisión a los recursos humanos que desarrollan actividades en las
Oficinas nacionales de Propiedad Intelectual.
El mecanismo asegura que una vez aprobadas las leyes, sean
finalmente instrumentadas por los organismos de Propiedad Intelectual, quienes garantizan la defensa del interés de las corporaciones.
Una
de las características del sistema, es que los directores de las
Oficinas permanecen en sus cargos independientemente del signo político
del gobierno que dirige los destinos del país, constituyéndose de este
modo una conducción estable que permita el mantenimiento efectivo de
las políticas establecidas.
Otra
característica de relevancia es que la capacitación de los recursos
humanos es exclusiva y abrumadoramente provista por las Oficinas
Internacionales de Propiedad Intelectual, asegurándose de esta forma el
adoctrinamiento de un modo “profesionalmente neoliberal”. Este esquema
ha instalado el discurso único en materia de conocimientos asociados a
las diversas disciplinas que constituyen la denominada Propiedad
Intelectual.
Finalmente,
es oportuno resaltar el dócil alineamiento de las autoridades
encargadas de la aplicación de las leyes, de modo tal que son
permanentemente convidados por instituciones internacionales a
congresos, seminarios y encuentros organizados por dichas instituciones
y destinados a “fortalecer” y “armonizar” las políticas neoliberales en
materia de Propiedad Intelectual. Por último, si el funcionario en
cuestión realiza su tarea fielmente, podrá continuar su carrera en
algún cargo dentro del organismo internacional o, en su defecto, en
alguna consultora o buffet local especializado en Propiedad Intelectual.
Es
evidente que, solo con la unidad y la cooperación solidaria de aquellos
Estados de Latinoamérica y el Caribe, y con el trabajo de aquellos
funcionarios comprometidos con políticas nacionales en sintonía con el
nuevo proceso de integración
Latinoamericano, se podrá desandar el camino del neoliberalismo en
Propiedad Intelectual, para de este modo, servir a los intereses
nuestros Pueblos.