Yesimar Urbina, una niña yukpa de 5 años de edad, sufrió una mordida de la serpiente mapanare rabo seco, en el sector indígena del río Kunana, en la sierra de Perijá, estado Zulia, por lo que necesita con urgencia suero antiofídico.
La niña sufrió la picadura de serpiente cuando jugaba en el patio de su casa, la mañana de este viernes, de allí fue llevada de urgencia al ambulatorio de el Tukuko y de allí al hospital de Machiques donde fue Ingresada de emergencia y con varias horas de retardo, debido a la falta de transporte y de gasolina. Allí informan sus parientes que presentaba mordedura de serpiente del tipo, mapanare rabo seco, en el área del glúteo. El Dr. Ignacio Montana médico pediatra de guardia la hospitaliza en el área de emergencia de Pediatría. Luego del chequeo médico dictaminó que la paciente presentaba un cuadro de envenenamiento bothopico y alteración de la coagulación sanguínea.
En la emergencia del hospital le suministraron un kit de suero antiofídico, pero debido a la gravedad del caso, la niña está requiriendo que le apliquen más cantidad de estos sueros antiofídicos. La paciente requiere por lo menos dos kids más.
La madre de la niña, Luz Mejía de 20 años de edad se trasladó hasta la sede de los bomberos en Machiques donde solicitó apoyo para salvar a su hija, los Bomberos hicieron contacto con el mayor Luis Contreras Bombero. De acuerdo a la última evaluación, podría ser trasladada al hospital Chiquinquirá de Maracaibo.
De acuerdo a reportes de expertos, en Venezuela mueren más de 60 personas al mes por mordeduras de serpientes. La falta de sueros antiofídicos en los hospitales rurales del Zulia es bastante grave, sobre todo en las zonas indígenas, donde es alto el índice de mordeduras de serpientes. No hay vehículos para el traslado de las víctimas, y los dispensarios o centros de salud tampoco cuentan con las cantidades de suero antoofídico para estos casos. Esta situación es bastante grave porque han muerto personas que han podido ser salvadas solo con la aplicación de los sueros. El abastecimiento rutinario de estos sueros, evitarían los traslados y salvarían las vidas de los habitantes de estas regiones.