Los pueblos del mundo despiertan, en gran parte gracias a la diplomacia de bayonetas y cañones que caracteriza a la administración imperialista, hoy mas descarada y descabellada que nunca, por otra parte, también, gracias al aumento de las desigualdades sociales que se evidencian en todos los países del mundo y dentro del imperio, productos de políticas impopulares, incluso, hasta rechazada por algunos de sus patrocinadores como por ejemplo el Banco Mundial BM.
Hoy el turno recae sobre Noruega, tierras de los grandes guerreros de cuya historia recuerda a los Vikingos (siglo IX y XI), la alianza de izquierda conformada por el partido laborista, socialistas, ecologista y comunistas, obtuvieron 50,2 % del escrutinio, frente al 48,7% del bloque de centro-derecha. Esto preocupa al imperio, veamos por qué.
Es importante recordar que, aunque Noruega esté conformada por una monarquía constitucional, los poderes ejecutivos son ejecutados en la práctica por el consejo de estado, de cuyo primer ministro depende desde 1884 de la aprobación del parlamento.
La importancia que reside en Noruega para las ansias devoradoras del capital, lo representa su riqueza petrolera. Este país es el tercer exportador mundial de crudo, Posee prácticamente la mitad de las reservas de petróleo y de gas natural de Europa sus mayores campos petroleros se encuentran en el Mar del Norte. Noruega, a través de su empresa petrolera propiedad del Estado llamada Statoil exporta casi el 90 % de su producción.
Noruega en la actualidad cubre el 10 por ciento del consumo europeo de gas natural y se prevé que sus exportaciones aumentarán considerablemente dentro de unos pocos años, al objeto de cubrir el 30 ciento de las necesidades de Europa. La red noruega de gaseoductos recorre desde el Mar del Norte y el Mar de Noruega hasta Inglaterra, Alemania, Bélgica y Francia.
Otro asunto de vital importancia y que incumbe al imperio, lo son los llamados “Petrodólares”. Los exportadores de petróleo otorgan inmensos beneficios a la moneda en la que reciben sus pagos. Noruega ha invertido decenas de miles de millones de dólares en acciones y bonos del estado de los EE.UU., al igual que Rusia y Arabia Saudita como primer productor de petróleo que posee alrededor de 700 MMM de dólares invertidos en los Estados Unidos.
El uso del dólar como moneda de reserva, de todos los países petroleros, en los mercados mundiales del petróleo y el comercio, mantiene la demanda de esta moneda ficticiamente alta, esto posibilita a los Estados Unidos seguir imprimiendo dólares al precio de nada, implementar recortes de impuestos, aumentar el gasto militar y el gasto de consumo de bienes de importación arropar su deuda externa y su déficit fiscal.
Noruega, ha sido considerada por los Estados Unidos como un país de importancia estratégica, fundamentalmente; por sus fronteras con Rusia y su importancia petrolera. De unirse Noruega a la Unión Europea (UE) o un cambio político, con signo de izquierda, es muy probable pensar que las transacciones petrolíferas se realicen en euros., de producirse este cambio, los intereses del Capital norteamericano se verían enormemente perjudicados.
Otro factor importante para el imperio norteamericano a decir de Noruega, lo representa su participación en la OTAN, y su colaboración en la guerra de Irak con un pequeño contingente militar, políticas que fueron fuertemente cuestionadas por la izquierda de ese país y que ahora en el poder, de seguro, no dudaran en reparar.
Mr. Danger, ahora más preocupado que nunca, seguro creerá que la revolución venezolana, está detrás de todo esto, que Chávez no solo desestabiliza al continente americano, sino también, al mundo. Nunca entenderá que las revoluciones son el resultado de las condiciones de explotación de cada país, y que el presidente Chávez al igual que Fidel son solo factores moralizantes. La bota yankee tropieza nuevamente.