La Fuerza PATO de Tarea (Países Anti Terroristas Organizados) arremetió al mismo tiempo en diversas regiones. La Hora M se produjo cuando la Machado, heroína de la resistencia, transmitió por televisión un video exhortando a la alta sociedad civil a repudiar la tiranía y a desplegar la bandera de las estrellas (las estrellas de Hollywood, naturalmente) en sus mansiones y penthouses.
Los desembarcos ocurrieron en las costas de Sucre, Anzoátegui, Carabobo y Falcón. Tropas aerotransportadas tomaron aeropuertos y bases militares en Maracay, Valencia, Maracaibo y San Cristóbal. Campos petroleros, puentes, túneles y represas fueron controlados con poco daño colateral.
Una semana después el gerente del consorcio Halliburton anunció la conformación del gobierno interino integrado por la SAPO (Sociedad Antiterrorista de Partidos Opositores).
Cada espécimen de SAPO se rotaría una semana al estilo del Jefe por Nueve Días de Sears Roebuck.
El anuncio inicial del primer SAPO fue la reconstrucción total, en tiempo récord, del viaducto, a cargo del Cuerpo de Ingenieros del US Army.
Los navíos de la Sexta Flota, además, desembarcaron en La Guaira los equipos para el rediseño del estado Vargas, dándole inicio a la obra.
Los contratos de reconstrucción fueron adjudicados bajo criterios inobjetables por la Halliburton. Les tocaron a empresas vinculadas a los Bush, Cheney, Rumsfeld y Condy Rice.
Los magnates criollos controlaron conglomerados licoreros y alimentarios. El más sortario completó la serie con el equipo de beisbol, el estadio privatizado, las transmisiones por TV, la cerveza, los refrescos y concesiones para papita, maní y tostón.
Lo chévere del caso fue que los gringos de la Fuerza de Tarea le agarraron gusto a las arepas rellenas y a las cachapas con queso. También aprendieron a jugar bolas criollas.
Los terroristas populistas del régimen desbandado se refugiaron al sur del río Orinoco y en algunas zonas montañosas andinas y orientales donde se sospecha tienen armas rusas y balalaikas.
Las elecciones serán organizadas por Súmate para una fecha no anunciada cuando el Registro Electoral sea como el de Miami. Es decir, sin pobres ni gente balurda.