I.
Ante la Orden Ejecutiva (Decreto Todopoderoso) del presidente de EE.UU, que declara abiertamente a Venezuela como su enemigo por constituir una amenaza (constitutes an unusual and extraordinary threat to the national security and foreign policy of the United State) y que le da poderes dictatoriales a Obama para ir a una guerra, tanto quienes vivimos en Venezuela como en el resto de América, tenemos que declararnos en Alerta Máxima.
Al analizar las siete páginas de la Orden Ejecutiva el 9 de marzo, encontramos que mas allá de acusar a 7 personas (aspecto en el que se distrae mucha gente), su fundamentación tiene un mandato aterrador (razón de Alerta Máxima): pone bajo sospecha a todo el pueblo venezolano y lo que es peor aun, todo el pueblo puede ser culpado por el Departamento de Estado, siendo la excusa perfecta del pueblo forajido para invadir Venezuela con la EXECUTIVE ORDER.
Otra razón de Alerta Máxima es que a EE.UU se le acabó el Menu para luchar contra la Revolución Chavista, solo le queda la Invasión: 1) Sus candidatos no pudieron ganarle elecciones ni a Chávez ni a Maduro; 2) sus guarimberos no pudieron tumbar al gobierno; 3) sus golpistas fueron espantados antes que se echaran la meada y estan huyendo o presos; 4) sus empresarios no pudieron ganar la guerra económica; 5) sus leyes injerencistas no dieron resultados y 6) los números no dan para ganar las próximas elecciones parlamentarias con la MUD para luego dar el "golpe institucional" a Maduro. Entonces, la lógica imperialista señala el camino de la invasión armada.

II.
Ya hay señales que se está asumiendo la Alerta Máxima en la batalla de ideas:
1) Posición del gobierno de Rusia (9 de marzo): "El agresivo aumento de las presiones políticas y sancionadoras sobre Caracas por parte de Washington disiente de la postura de muchos miembros de la comunidad internacional, que abogan por la búsqueda de soluciones constructivas para los problemas internos de Venezuela"
2) Pronunciamiento de Universidad Bolivariana de Trabajadores "Jesús Rivero" (10 de Marzo): "La Comunidad de la UBTJR rechaza la mentira del presidente Barak Obama, ya que sabemos se trata de una nueva patraña imperial para obtener el consentimiento de la opinión pública internacional y así legitimar la invasión y anexión del territorio venezolano, rico en petróleo, gas, agua y biodiversidad, masacrando a la población en su totalidad, sin ningún miramiento, tal como ha sido su sangrienta política en el mundo a través de la historia."
3) Los movimientos sociales del mundo (10 de marzo): "Los pueblos estamos con Venezuela. Convocamos a todas y a todos a expresar su rechazo ante esta agresión, mediante declaraciones y acciones directas".
4) Líderes opositores: "Es un documento amenazante, irrespetuoso, injerencista e inamistoso. No lo podemos permitir así tengamos diferencias con el gobierno", Henri Falcón - Gobernador de Lara (Programa Primera Página de Globovisión, 11 marzo 2015) .
5) Comunicado de la iglesia católica, firma el Cardenal Urosa Sabino (12 de marzo): "Parece una exageracioín del Gobierno norteamericano afirmar que Venezuela sea una amenaza para la seguridad interna de los Estados Unidos. Esa afirmacioín es inaceptable por las consecuencias que puede tener para todos los venezolanos, no solamente para el Gobierno nacional."

III
Quienes somos amantes de la paz, porque: 1) condenamos 120 años de invasiones armadas sufridas por los pueblos del mundo; 2) nos duelen los caídos; 3) todavía lloramos a nuestros familiares masacrados en Panamá (1989) y 4) comprendemos la magnitud de la destrucción en una invasión, estamos obligados a hacer lo imposible por evitar la invasión armada a nuestra Patria.
Primero, respaldar las acciones del Camarada Nicolas Maduro, que en el plano diplomático, hace para evitar la invasión: La Ley Habilitante Anti-Imperialista contra Orden Ejecutivo, Asamblea de UNASUR, maniobras cívico-militares.
Segundo, movilizarse a nivel regional, nacional, continental y mundial: Marchas, concentraciones, manifiestos, foros, entrevistas y posiciones.

Está prohibido banalizar el intento de invasión.