Creo con sinceridad que tenemos que demostrar nuestro compromiso con la Patria y como no somos una potecia bélica, nuestras firmas son las armas. Con todo respeto cualquier tergiversación que se haga de la intención con la que firmamos para demostrar que tenemos Patria, es por lo menos casi escualida. Junto a los pueblos del mundo estamos exigiendo respeto y con nuestras firmas estamos avalando esa petición.
Si fueramos China con más de la tercera parte de la población mundial y siendo la primera potencia del mundo podríamos decir que si somos una amenaza, pero, y gracias a Dios, no lo somos para nadie, si no es derogado el dichoso esperpento ese (del cual a cada rato quieren convencernos de que en realidad es una nueva versión del Padre Nuestro), pues que no lo deroguen, nuestro compromiso con nuestros hijos y nietos (y los de todo el mundo), es ponerles en la cara nuestra exigencia.
La critica destructiva es siempre sospechosa.
Aquel que no esté de acuerdo con firmar, pues que no lo haga, pero al menos por respeto a los millones que lo estamos haciendo que no desmerezca nuestro esfuerzo, hacer de nuestra Patria una potencia de solidaridad que no amenace a nadie sino que humildemente, como hasta ahora lo ha hecho, ayude a todo el mundo, es lo que tenemos que lograr llegando hasta el último rincon del planeta.
Rodilla en tierra y todos a firmar lo más pronto posible para recolectar 20 millones que se los debemos