Cristóbal Colon acudió a la corte de los Reyes Católicos Fernando II de Aragón e Isabel I de Castilla, soberanos de la Corona de Castilla solicitando financiamiento para buscar nuevas rutas, islas o tierras firmes sin descubrir y la ganancia de Colon, seria en títulos hereditarios, prebendas y el diez por ciento del producto neto de la mercadería comprada, ganada o hallada en su empresa; todo un “mercenario”; es aquel que lucha o participa en un conflicto bélico por su beneficio económico y personal, normalmente con poca o nula consideración en la ideología, nacionalidad o preferencias políticas con el bando para el que lucha. Este contrato entre la Corona de Castilla y el “mercenario” de Colon dejo a nuestra América el “holocausto” o “genocidio” indígena con millones de mujeres, niños, hombres y ancianos asesinados en nombre de Dios y el Eurocentrismo.
La historia se repite con otro “mercenario” como Felipe González quien con la palmada en el hombro de sus amigos Juan Carlos I de España, José María Aznar representantes del Franquismo, Carlos Slim multimillonario mexicano, Alvaro Uribe paraco colombiano con la asesoría de la gusanera miamera, el Departamento de Estado de EEUU y la CIA; este español se embarca en la empresa de la RECONQUISTA de Venezuela; utilizando el Grupo Comunicacional PRISA para RETAR con arribar el 17 de mayo próximo a la Patria de Bolívar para sacar de Ramo Verde y de cualquier cárcel del país a los fascistas para que puedan seguir haciendo “Guarimbas” y derrocar a Nicolás Maduro, barrer a la Revolución Bolivariana y entregar el Petróleo a las Transnacionales Petroleras.
Este guion de Hollywood escrito por Mario Vargas Llosa solo puede ser parte de un Mundo al Revés aplicado a Venezuela; cuestión que expresa el cantautor Reinaldo Armas en la letra de la canción “El Zamuro y El Avión” en su ultima estrofa “un jactón ciudadano conociendo sus defectos maltrata a un hombre perfecto gentil, caballero y sano”. Es el derecho a la legítima defensa lo que nos queda a Venezuela y a Latinoamérica para preservar la Soberanía y la Libertad de decidir nuestro destino; quedo claro en la última Cumbre de las Américas que se agota la vía diplomática para hacer respetar el derecho internacional y es la fuerza; el medio que pretende imponernos el Imperialismo para instaurar en el Continente el Neoliberalismo; su desesperación es tal ante el colapso de Europa y EEUU en sostener la gobernabilidad de las “Corporaciones” ante la imposibilidad de sostener el sistema.
¿Qué hacer? Resistir primero con la Unidad interna de los revolucionarios, segundo insistir en la organización y control del territorio comunal, tercero fortalecer las Alianzas Internacionales basadas en la solidaridad en intercambios tecnológicos para resolver problemas comunes regionales y por ultimo seguir paso a paso la enseñanza en conflictos de baja y alta intensidad que de manera magistral sorteaba nuestro Comandante Hugo Chávez con el Análisis de la Coyuntura.
