De acuerdo a las instituciones encargadas de elegir a el, o los premio nobel de paz, Este premio es otorgado a personas o grupos que han dado aportes importantes en la investigación de diferentes ciencias naturales. O en matemáticas literatura etc. Y también a aquellas que han sido promotoras de la paz a nivel mundial, total es que este premio se viene otorgando desde 1901, en honor a Alfred Nobel un ingeniero químico sueco. De ahí en adelante muchos son los que han sido merecedores de este premio, que no sólo es un premio para enaltecer la labor realizada, sino que recibe grandes aportes económicos para que continúe la investigación o la labor a la que haya dedicado su causa.
El caso es que si revisamos la biografía de Barack Obama presidente de los Estado Unidos de Norteamérica, quien recibió el premio nobel en octubre de 2009, no vemos allí, ni requisitos ni virtudes, para ser merecedor de tan ostentoso premio. Barack Obama, es abogado egresado de Harvard, fue profesor de derecho, que no dejó ningún aporte importante al mundo y un asiduo luchador, para ganarse un puesto para él, en la política estadounidense, en su discurso dijo que terminaría con la guerra en Irak y que promovería el desarme nuclear. Lo único que le falto fue el pequeño detalle, de como llevaría a cabo está misión. Y esos fueron los méritos que le acreditaron el premio Nobel de la Paz.
Ahora bien, si, terminó con la guerra en Irak dejó un país en ruinas, aunque él no dio la orden de invasión, a su llegada al poder pudo haber cambiado en algo la historia, él dice orgulloso que las tropas estadounidenses salieron con la cabeza en alto, así fue, pero con una estela de muerte tras su espalda, muertes que hasta hoy el mundo ve como injustificadas, ya que los motivos que llevaron a la invasión nunca fueron confirmados.
Ordenó a sus tropas ocupar Afganistán, y el mundo conoce como son las ocupaciones de las tropas de EE.UU en un país extranjero. En su proceso de paz, dio la orden de incursión militar en el conflicto libio en donde los rebeldes habían acabado con el gobierno de Maumar Gadafi. También en nombre de la paz, ha apoyado irrestrictamente a Israel en su conflicto con Palestina, terminando con miles de vidas humanas la mayoría de ellos, mujeres y niños. Ahora decidió mandar tropas a Siria también a dar su aporte con la paz. Pero no olvidemos mencionar entre los méritos de Barack Obama, la amenaza que profirió contra Venezuela en marzo de este año, cuando la declaró: UNA AMENAZA INUSUAL Y EXTRAORDINARIA PARA EEUU. Cuyo decreto aún está vigente, que nadie ha dicho que esté engavetado, porque con cada declaración emitida por agentes de su gobierno, sentimos que la sacan y revisan las condiciones para ejecutarla. Y es así como ha vivido el mundo bajo la acechanza de un premio Nobel de la Paz, que pareciera que la única paz que funciona para él es la paz de los sepulcros, porque donde su mirada se fija y su voz ordena, miles de lápidas graban sus nombres. Y muchas de ellas quedan sin nombre, no son las del soldado desconocido, sino las víctimas no identificadas dejadas por sus tropas aniquiladoras.
