Estaba en días pasados en franca y amena tertulia política con mi querido primo-hermano Fernando Aché Sandoval como solemos hacer cada vez que nos encontramos, y el tema que tratábamos podríamos considerarlo, que obligado, ante los constantes ataques imperiales contra el sistema político escogido por el pueblo venezolano bajo el liderazgo de nuestro amado Hugo Chávez y continuado en el tiempo por el primer presidente Chavista de Venezuela Nicolás Maduro; la conversación giraba en torno al anuncio que este hiciera de decretar como "Día del Antiimperialismo BOLIVARIANO" al 9 de marzo, recordando que se cumplía el segundo aniversario de la fecha en que el entonces presidente de Estados Unidos Barack Obama, decretaba a Venezuela como una "amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad de la nación estadounidense" arreciando así una campaña sostenida desde el ascenso al poder político de Venezuela por la Revolución Bolivariana.
Resaltaba Fernando en nuestra conversación que a Venezuela se le podría catalogar como el país vanguardia de las luchas antiimperialistas en el mundo, luchas que se remontan a las épocas de la conquista, la colonia y la independencia contra el poderoso imperio español y desde entonces y hasta nuestros días en la defensa de nuestro territorio, nuestras apetecibles riquezas naturales y el derecho a ser libres e independientes que pretenden negarnos los grandes poderes fácticos mundiales liderados por el imperio estadounidense; ya en 1989 se enfrentaba el pueblo venezolano al famoso paquete económico neo-liberal del F.M.I. implementado en el segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez y que todo conocemos como el CARACAZO, al cual él etiquetaría como el CARACAZO II, ya que se olvida un hecho histórico de trascendental importancia sucedido en Caracas el 13 de mayo de 1958 y cuya sinopsis se relata de inmediato para aquellos lectores bisoños y algunos contemporáneos desmemoriados.
Para la fecha antes citada habían transcurrido escasos tres meses y veinte días de la caída del dictador Marcos Evangelista Pérez Jiménez cuando llegaba al Aeropuerto de Maiquetía como parte final de una gira por países suramericanos procedente de Perú e invitado por las nuevas autoridades venezolanas surgidas de componendas políticas para recuperar el poder perdido de la oligarquía, el Vicepresidente de los Estados Unidos Richard Nixon en representación del gobierno presidido por el General Dwight Eisenhower, quien recién había condecorado al dictador venezolano. Al bajar del avión en Maiquetía un numeroso contingente humano sonando trompetillas y portando carteles de rechazo rodeó el vehículo donde era trasladado hacia Caracas en un accidentado viaje donde el rechazo al Vicepresidente arreciaría en la entrada de la Avenida Sucre de Catia cuando el vehículo fue atacado con piedras, huevos, tomates y patadas hasta romper los vidrios permitiendo que algunos escupitazos fueran a dar en las humanidades de Nixon y Pat, su señora esposa. Fue tan violento el ataque que hubo que reforzar con tropas armadas a la caravana y trasladar en otro vehículo hacia la embajada de su país a este personaje y su comitiva, cancelando su visita al Panteón Nacional donde osaba irrespetar a nuestro Libertador con una corona de flores imperiales. Es importante destacar que Richard Nixon en sus memorias hace referencia a esa visita y considera ese día como uno de los más aciagos de su vida.
Por supuesto que ante la importancia mundial de la noticia que ilustraría las portadas de revistas como LIFE en español y otras publicaciones, con imágenes donde aparecía la acción de los protestantes contra la limusina Cadillac que transportaba al Sr. Nixon y a Pat, su Sra. esposa, cundió la alarma en E.E.U.U. por la seguridad de los personajes y ya los marines estaban preparados para una intervención militar desde Puerto Rico con paracaidistas aerotransportados que rescataran a su provocador emisario, mientras las "fuerzas vivas" de nuestra patria, representadas por Rómulo Betancourt, Eugenio Mendoza, Blas Lamberti y Numa Quevedo entre otros, se rasgaban vestiduras y despotricaban de nuestro heroico pueblo por su acción antiimperialista. Se comentaba que el Vice-Almirante Wolfgang Larrazábal quien para el momento era el residente de la Junta de Gobierno de Venezuela, sentenciaría: "Que si él hubiera sido estudiante habría actuado de idéntica manera".
Volviendo a nuestra conversación y como no hay nada más dinámico que el verbo compartido llegamos a lo que se convertiría en el centro del diálogo político: la pertinencia, la oportunidad, el análisis, la importancia del hecho histórico y la enseñanza que este nos deja y fue cuando Fernando recordó y trajo a la discusión el 13 de mayo de 1958 para que tomáramos conciencia de la gran importancia de esta efemérides donde se manifiesta de manera insuperable en la era contemporánea la estirpe guerrera de nuestro pueblo y sus sentimientos antiimperialistas
Remataba Fernando su aseveración histórica, concluyendo que los hechos del 13 de mayo de 1958 corresponden con el sentimiento antiimperialista del pueblo venezolano para dar origen al "Día del antiimperialismo Bolivariano" en vez del 9 de marzo, de reciente decreto por el Presidente Maduro que corresponde a esta fecha del año 2015 donde más bien se realizó por parte del imperio estadounidense el "Día del antibolivarianismo imperial" con el vil decreto de Obama.
Nuestra conversación terminó con la inquietud de hacerle llegar a nuestro presidente por cualquier medio la respetuosa sugerencia de que tomara en cuenta lo aquí expresado no sin antes aclarar que nuestra proposición tiene validez solo como hito histórico contemporáneo ya que el sentimiento antiimperialista del pueblo venezolano se remonta al heroico comportamiento de nuestros padres indígenas ante la invasión del imperio español y que cualquier día es oportuno para protestar en las calles contra la política exterior del mayor enemigo de la humanidad en la historia mundial. Recordemos al Padre de la Patria cuando en carta dirigida al ciudadano Bautista Irvine, agente de los Estados Unidos de la América del Norte, cerca de Venezuela, en fecha 7 de octubre de 1818 le expresaba: "Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero, si todo el mundo la ofende"
NB: Hay suficiente literatura y videos alusivos a la fecha 13/05/1958 en la web.
Miguel G. Osío S. V-11.347.833 [email protected] @mgosiosandoval